— ¡Saaaanjiiiiii!
Se puede ver a un pelinegro tirándose arriba de un joven cocinero en su abitad natural.
— ¿que paso ahora luffy?— pregunta el rubio sin prestarle atención al intruso.
— tengo haaaambreeee— se queja abrazándolo por la cintura.
— todavía la comida no está lista, pero te puedo hacer un bocadillo.
— ¡gracias sanji! Lo voy a comer ahora.
— ¿como si todavía no...? ¡¡AAAAH!! ¡quítese perro!— le lanza una patada al monkey mandándolo a volar.
El pelinegro desde su posición en el suelo, puede ver la clara masca de mordida que tiene el blondo en su blanco cuello.
— ¡shishishishi! ¡gracias por el bocadillo sanji!— se despide del rubio dándole sus típicas sonrisas y luego echa al pire.