𝐈𝐈𝐈

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𝐅𝐢𝐟𝐭𝐡 𝐲𝐞𝐚𝐫 - 𝟏𝟗𝟗𝟓

Las ojeras se hacían notar bajo los ojos de Elena, denotando la falta de sueño de la noche anterior. Se encontraba caminando por los pasillos, al Gran Salón, unas semanas después del primer día del quinto año.

No recordaba la última vez que había dormido bien; con la profesora nueva, Umbridge, las reglas se volvían cada vez más estrictas, dejando poco lugar a la diversión. Esto, sumado a sus recurrentes pesadillas sobre Tom Riddle, le habían bajado la moral.

No, no soñaba con Voldemort. Jamás lo había visto; lo único que su mente conocía era a un chico de su edad, con un notorio parecido a Mattheo.

Se dirigió hacia la mesa de Gryffindor, captando un par de miradas a cada paso. A pesar de, según ella, estar "demacrada", su belleza notoria seguía dando de qué hablar, y esto comenzó a incrementarse a partir de este año. Ya era una joven de 16 años, y eso no había pasado desapercibido para los varones del colegio.

Sonrió ligeramente cuando vio el lugar vacío al lado de Harry, el cual por poco no tenía un cartel de "Reservado" con su nombre. Se puso el dedo sobre su labio, indicando silencio, cuando Hermione y Ron la vieron; aprovechó estar a espaldas de su amigo, y que este estuviera en su mundo, para darle un pequeño susto.

— ¡Elena! —se sobresaltó, para después reírse con ella— Buen día a ti también, ¿no?

— Era muy tentador, lo siento. —respondió ella entre risas— Hola.

— Hola.

Fueron dos segundos, eternos, pero dos segundos al fin y al cabo, donde conectaron directamente sus miradas después de saludarse. La chica notó una ligera tensión, pero la desvaneció saludando a los demás.

Cada vez se le hacía más complicado estar cerca de Harry sin mirarlo de otro modo. Probablemente eran las hormonas haciendo de las suyas, pero podía jurar que nunca lo había visto tan guapo, y de cierta forma, eso le molestaba. Siempre había sido de esas personas que necesitaban expresar todo con contacto físico, pero ahora, los más ligeros roces que tenía con él la hacían ruborizar.

La única que estaba al tanto de esto era Hermione; la chica lo había descubierto por si sola a mediados de cuarto año, y Elena no tuvo más remedio que confesarlo. El Torneo de los Tres Magos había despertado toda clase de emociones en ella, y definitivamente logró que pueda definir sus sentimientos hacia él.


𝐅𝐨𝐮𝐫𝐭𝐡 𝐲𝐞𝐚𝐫 - 𝟏𝟗𝟗𝟒

𝐅𝐢𝐫𝐬𝐭 𝐓𝐚𝐬𝐤.

— ¿Harry?

— ¿Elena? ¿Eres tú?

Una densa tela de lona separaba sus cuerpos, pero estaban alejados a solo unos centímetros, sin poder verse. El muchacho estaba esperando su turno para salir y enfrentar a un enorme dragón, arriesgando su vida.

— Yo... Quería verte, antes de que salgas.

Harry sonrió, su completa atención estaba en su voz.

— Bueno, en realidad no te estoy viendo. —soltó una risa nerviosa.

Su preocupación era muy grande como para poder brindar palabras de apoyo, titubeó unos segundos más, hasta que se decidió por abrir la cortina de la tienda y abrazarlo fuertemente. Él se lo devolvió, necesitado.

— Ahora si me ves. —le respondió, sin quitar su sonrisa.

— Estoy muy preocupada por ti... pero quiero que sepas que voy a estar en primera fila apoyándote. Hice un cartel y todo.

Suspiria | Harry Potter/Mattheo Riddle [ES]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora