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ꕤ˚⌑
Caminé hacia la casa de Sinan encontrándome al y Eda bebiendo cerveza, caminé hacia ellos en silencio quitándole la cerveza a Sinan y bebiendo un sorbo para luego devolvérsela y sentándome en el piso frustrada.
—Al parecer alguien no tuvo un buen día, eh— exclamé Eda, apreté mis labios.
—Cuénteme algo, para poder callar mí cabeza un rato— suspiré mientras los miraba.
—Sinan e Isik— dice Eda sonriendo, miré al mencionado entre cerrando los ojos.
—¿Qué sucede con mí hermana? —pregunté seria.
—Le estaba diciendo que debería abrazarla y besarla ya que él también siente lo mismo, ¿tú qué opinas?
—Que tienes razón, no deberías de perder la oportunidad Sinan, porque después puede ser demasiado tarde. Creeme qué a ella le encantaría qué hicieras algo así, Sinan— exclamé con una sonrisa.
—¿Ves? Tenía razón— dice Eda bebiendo de su cerveza.
—Quizás, pero de igual forma le he hecho daño— escuché a Sinan decir en un murmuro, suspiré mirando el mar.
—Entonces intenta cambiar eso, intenta remediar tus errores. Isik no es una persona orgullosa, siempre ha creído en las segundas oportunidades. Además, creo que eres especial para ella— le digo con una sonrisa, mientras este me hacía una media.
—¿A tí qué te sucede? —pregunta Eda extendiéndome de su cerveza, acepté y bebí un sorbo.
—Qué siempre lo arruinó todo, pero no quiero hablar de eso ahora— comenté con una sonrisa triste, y pasándole su cerveza, con eso estaba bien.
—Es normal tener miedo y equivocarse, Irem— habla Sinan mientras yo suspiraba.
—Si, puede ser.
(...)
Estábamos ensayando con los estúpidos paraguas, miraba a Osman con el letrero pero este no me había hablado ni mirado, me lo merecía.
—¿Qué estás haciendo, Sinan? Levantalo, quieres— le indica la profesora Burcu.
—Profesora, mí paraguas se rompió— le avisa una alumna mientras yo bajaba el mío con una mueca.
—Nuestro cumpleaños es en tres días. Nuestra mamá ya empezó a planear nuestra fiesta— comenta Isik haciendo qué la miré con una pequeña sonrisa.
—Es verdad, la escuché comentar algo en la mañana.
—Si me dijo que te preguntaría en la tarde que ibas a querer— me dice Isik enganchando su brazo con el mío.
