Sentía que se iba a morir.
Cuando su esposo estaba triste.
Cuando su esposo tenía dolor.
Le dolía más que cuándo él tenía dolor.—Y bien… —Dijo el doctor mientras acomodaba sus lentes y leía los papeles con el resultado de la prueba de embarazo, hechas por sangre para eliminar cualquier posibilidad errónea.
Esta era la prueba del mes siete, y probablemente la más importante, porqué aquí terminaba el tratamiento, ya que más de ese tiempo podría ser perjudicial para el cuerpo humano.
—Es negativo.
Los miro con disculpas en los ojos.
—No esta embarazado señor de Jeon. —Les dio una ligera mirada triste pero rápidamente se recompuso y les hizo una reverencia en modo de disculpa.
—Seguiremos esforzándonos. Gracias por confiar en nosotros en todo este tiempo. Y discúlpenme.
Y sin más salió de esa habitación blanca, silenciosa y con olor a fármacos.
Y luego sollozos.
Yoongi estaba sentado en la camilla, llorando. Y Jungkook casi podía oír el sonido de su alma rompiéndose.
—Mi príncipe… —Jungkook cayó de rodillas y se apoyó en las piernas de su esposo quien lloraba con las manos en la cara. —Lo siento tanto.
Se sentía tan mal.
—Seguro soy yo el problema. —Recargo su cara el sus piernas y sin darse cuenta el también estaba llorando. —¿Qué más puedo hacer por tí, pétalo? —Sorbió su nariz.
Estaba temblando, no quería imaginar cómo se sentía su esposo.
Era un hombre inútil, lo único que su esposo quería y él no podía cumplirlo. No podía hacerlo.
¿Por qué era así?
¿Por qué cuando ellos lo deseaban tanto?
¿Por qué eran así con ellos?
Yoongi no respondió nada. Se levanto lentamente de la camilla haciendo que su esposo lo mirara con los ojos nublados en lágrimas.
Se acomodó en el suelo, donde anteriormente su esposo se había arrodillado ante él. Y se sentó a la par de Jungkook, quedándose a su lado.
—Solo te quiero a mi lado para siempre.
—¡Beomie! —Jimin regaño suavemente a su hijo. —¿Qué te ha dicho mami de tirar la comida en la cabeza?El bebé de solo seis meses balbuceo mientras mordía su propia mano, como solo tenía dos dientecitos era como un juego para él, su babita se escurría por la comisura de sus labios gorditos. Y claro, el plato se encontraba volteado en su comedor especial y su comida, fideos para ser más específicos, bañaban por completo su cabello rubio.
Yoongi miró todo esto con una ternura que lo hizo suspirar.
—Siento esto, Yoonie. JaeBeomie esta aprendiendo a ser más educado, pero le cuesta. —Explicó. —Es un poco torpe, como su padre. —Río con ternura mientras comenzaba a recoger las cosas tiradas para luego sacar el plato de la cabeza de Jae que bastante entretenido estaba con sus dedos.
—Sí quieres puedo… cambiarlo. —Yoongi le pidió despacio mientras miraba con atención al bebé que ahora reía con su madre.
—Oh, claro, claro, tienes que ir practicando. —Dijo mientras sacaba al bebé de la silla alta para llevarlo con Yoongi. —Luego puedes contarme como te fue en tu consulta, debes estar emocionado. —Río adorablemente. —Vamos, tienes que aprender.
Yoongi solo miró con ojos brillantes al bebé que ahora lo miraba con atención. Ignorando su pesar.
Cuando llegar al cuarto del bebé que estaba decorado con patitos y dinosaurios, tal vez Yoongi sintió un poco de ganas de llorar.
—Yoonie. —Llamo Jimin, mientras acomodaba a Jae en la camita especial para cambiarlo. —Cuida que no se caiga, iré a por las cosas para cambiarlo.
Yoongi asintió.
Jae lo observaba atentamente, alzando sus bracitos en un intento por tocar su cara.
Jae arrugó su nariz al recibir tan poco atención del amigo de su mami.
Yoongi estaba nervioso y solo atinó a tocar con su dedo la mejilla gordita del bebé. Jae río mostrando sus dos dientes delanteros.
Yoongi pensó que Jae era una copia de Jimin, tenía su mismo color de cabello y sus labios, sus ojos sí que eran más parecidos a los de Namjoon y su color de piel siendo una mezcla de ambos.
Sus cejas se curvaron en una señal de tristeza.
Él también hubiera querido un niño con los mismos ojos de su esposo, o una niña con el mismo lunar en la nariz. Un hijo de Jungkook.
Trato de olvidar su tristeza cuando Jimin llego y juntos comenzaron a cambiar a Jae.
Luego de un rato terminaron y jugaron con Beom que luego de eso cayó rendido y durmió como un bebé, literalmente.
Ahora Jimin y Yoongi están sentados en la sala tomado té de manzanilla y miel.
El rubio revolvía el azúcar lentamente mientras miraba a su amigo. —¿No me contarás que paso? Actúas extraño.
Yoongi sonrió sin ganas. —Mimi… —Suspiro. —No estoy embarazado. No funcionó.
Los ojitos de Jimin se abrieron en grande y su cuchara cayó de sus manos. —Pero sí… Yo creí. —Jimin se tapo la boca.
Oh no, aquí venía.
Jimin se soltó a llorar y Yoongi solo pudo acompañarlo en el sentimiento ya que él se sentía peor.
Jimin sorbió su nariz mientras abrazaba a su amigo. —No estés más triste, Yoonginie. —Sus ojitos con sus pestañas húmedas lo miraron. —Olvidemos esto por un rato, vamos a comer galletas y malvaviscos.
Y como buenos amigos ahogaron sus penas en comida chatarra.
Todo era culpa del sistema. Todo era culpa del capitalismo.
©ther.
ESTÁS LEYENDO
𝗛𝗨𝗦𝗕𝗔𝗡𝗗¹
Romance୨ৎㅤjungkook ⊹ yoongi ୨ৎㅤyoongi bottom ꒰ bl ୨ৎㅤfluff ୨ৎㅤprólogo + indefinido