Capítulo 12

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Después de que el joven estuviera tan cansado que se quedó dormido por un corto tiempo, Chuyun fue a la farmacia para comprar un nuevo inhibidor de alta concentración.

El joven se despertó pronto. La reacción de celo estaba bajo control, pero las secuelas aún estaban ahí, sus extremidades estaban débiles, por lo que la belleza lo ayudó a levantarse de la cama, fueron al baño a lavarse y luego, pensativo, lo ayudó a recostarse en su cama.

Después de llorar y desahogarse una vez, el estado de ánimo del joven se volvió mucho más tranquilo.

Estaba sentado en el borde de la cama como un cachorro mojado que acababa de bañarse, y la belleza le soplaba el cabello con un secador de pelo.

Inconscientemente, se reclinó y se pegó en los brazos del hermoso hombre.

La gran belleza le dijo "Pegajoso" en medio del zumbido del secador de pelo, y le pellizcó la nariz. El joven no quiso refutar, bajó las pestañas y se miró los dedos.

En comparación con la sensación de no poder controlar todo su cuerpo cuando está en celo, este tipo de sensación leve y deprimente que incomodaría a los Omegas comunes era mucho mejor.

La belleza le secó el cabello con el secador y lo frotó provocativamente, el suave cabello se revolvió y cayó naturalmente sin tener arreglarlo, volviendo a su apariencia lacia.

Llevaba puesto un pijama de la gran belleza, como no era alto, el pijama era demasiado largo para él y los puños incluso le cubrían los dedos.

Aún soy un niño tan pequeño.

La belleza se sintió extremadamente conmovida, se agachó y lo miró de abajo hacia arriba.

Al cabo de un rato su tono se volvió serio: "Ahora es el momento de contarme. ¿Qué te pasó?".

Esta vez el joven no ocultó nada, solo dudó un poco y le contó los asuntos de su familia.

Pero esta vez, no mencionó sus varios períodos de celo.

Se atrevió a hablar antes cuando se estaba dando por vencido, pero ahora que alguien siente lástima por él, le da vergüenza hablar.

Pero la gran belleza no olvidó lo que dijo antes cuando se conocieron, cuando terminó de hablar, él le preguntó: "Hasta ahora, ¿fueron siete personas?".

"..." El joven asintió en silencio.

"Hoy serían la octava y novena, tu madre incluso quiso venderte a dos personas", resumió la situación con calma: "No estás en un celo normal, fuiste inducido por medicamentos". La belleza no pudo evitar apretar los puños. "Tu madre debería ir a la cárcel".

El joven no pudo responder, así que abrió sus brazos y le abrazó el cuello para escapar de la conversación.

El comportamiento coqueto del joven hizo que la belleza no pudiera resistirse, le dio unas palmaditas en el hombro, lo abrazó y le dio unas palmaditas en la cabeza.

Chen Xun luego susurró: "No lo sé".

La palma de la belleza cubrió la mitad de su rostro y las yemas de sus dedos lo frotaron suavemente: "¿No sabes qué?"

"No sé... cómo tratarla."

El miedo y los escalofríos fueron reales, pero la calidez y el amor que alguna vez se sintió por parte de su madre también fue real.

Esos sentimientos cálidos y hermosos realmente habían existido en su corazón, e incluso si fueran borrados, aún quedarían rastros.

Las emociones humanas son cosas tan complicadas que ni siquiera los eruditos y maestros zen pueden comprenderlas por completo, y mucho menos los niños.

La belleza no continuó con el tema, simplemente lo convenció para que se acostara en la cama y lo cubrió con una colcha. Luego la belleza dijo: "Puedes descansar un rato. ¿Tienes hambre? Si es así, te prepararé algo para comer".

El joven asintió.

Rong Chuyun continuó: "Hoy es domingo. El señor Chen, tu padre, salió a jugar con sus hijos. Probablemente volverá más tarde. Cuando te sientas mejor, déjeme hablar con él".

El joven inmediatamente abrió mucho los ojos, lo miró fijamente y le dijo: "No lo busques".

Belleza: "¿Por qué?"

"..." El joven volvió a apartar la mirada, "Finalmente consiguió una nueva familia, nunca quiso tener nada que ver conmigo".

La belleza dijo: "Entonces, cuando vio que estabas herido, fingió no verlo, mas allá de dar dinero, los ignora a ti y a tu madre. ¿Y lo aceptas así?"

El joven asintió lentamente.

"Eres tan tonto", suspiró la belleza, "¿Por qué no piensas más en ti mismo?"

Un beso amoroso cayó sobre su frente.

"Todavía eres sólo un niño. Hay algunas cosas de las que los adultos deben ser responsables, no deberías de cargar con esa responsabilidad", dijo la belleza, "Él te ha ignorado durante tantos años y es hora de que asuma la responsabilidad".

Luego de una pausa, la belleza agregó: "No puedes rechazar este asunto. Ya lo he decidido".

Té ligero, vino dulce [BL]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora