Profe! - scaimar one shot

Palermo

Pablo mejor q nadie sabía lo q Lionel amaba a su moto, desde q entro a su secundario lo veía todas las mañanas llegar en esa Zanella Patagonia 150 de color negro mate junto con su casco polarizado y del mismo color q la moto. apoyaba su pierna en la vereda dejando ver cómo el pantalón se ajustaba a sus muslos trabajados, la chaqueta de cuero moviéndose levemente cuando bajaba de la moto y se sacaba el casco revelando sus rulos cortos caer sobre su frente, todo muy orgasmico para un Pablo de 15 años...

el cordobés estaba en su casa tirado en la cama mirando su celular, tenía una de sus manos descansando sobre su cabeza jugando con los rulos q caían sobre la almohada y sus piernas cruzadas en una posición rara, cómo a él le gustaba estar. su celular vibró en la mano viendo un mensaje de Lionel.

-"che lindo, vestite q te paso a buscar para ir a bailar. en 20 estoy"- Pablo salto de la cama agarrando sus ropas más lindas para tirar las contra su colchón, su profesor era un hijo de puta... ¿cómo le va a avisar con tan poco tiempo?.
el menor estaba teniendo un colapso ya q no tenía ropa para salir, estaba lloriqueando mientras se probaba ropa hasta q sonó el timbre. por suerte sus padres habían ido a visitar a su familia en Córdoba por lo q la casa estaba sola para el más joven quien bajo a abrir la puerta con un top de brillos, un short engomado negro y sus ojotas.

-sos un hijo de puta! ¿cómo me vas a avisar a las ocho de la noche q queres ir a bailar? ni me maquille!- dijo mientras lo dejaba pasar a su casa y el mayor lo abrazo por la cintura para encajarle un chape, el cual el más bajo se abrazo al cuello de Lionel para corresponder con una sonrisa. cuando se separaron el mayor golpeó el glúteo del dueño de la casa.

-hola Pablito, yo también estoy contento de verte- ambos se rieron y dejó pasar al más alto.

-no te me vuelvas loco pendejo, yo te espero pero a la 1 tenemos q estar en la puerta- ambos caminaron al cuarto de Pablo mientras se abrazaban y besaban tiernamente.

-¿q te pensas? ¿q tardo 4 horas en arreglarme?- si, Pablo podía tardar hasta más horas con tal de verse lindo para Lionel, pero para el profesor él era hermoso ya como estaba.

estaban ambos en el cuarto de Pablo mientras Lionel estaba tirando en su cama escuchando música mientras veía a Pablo peinarse y maquillarse para la noche, el lo miraba fijo abrazado a una almohada de River, mirando todos los detalles q no había visto de Pablo. como los lunares pequeños en su cuello q lo decoraban como si de la noche estrellada habláramos, su perfil parecía salido de una revista de modas junto con esos rulos color castaño q caían por la frente del más joven.
bajo la mirada a su torso viendo los brazos tonificados junto con sus piernas delgadas pero altamente tonificadas, el cordobés se dió cuenta de la mirada de su profesor por lo q se sonrío mirando al tocador q había en su cuarto y giro su rostro al del pujatense.

-¿que me miras, te gusto?-

-si, mucho.- contestó rápidamente el profesor haciendo q a Pablo se le aflojen las piernas de los nervios.

la noche transcurría con normalidad, pidieron una pizza, Pablo se bajó una botella de Fernet él solo mientras escuchaban Karina por los parlantes de la casa. Lionel no iba a tomar ya q era el conductor designado y aparte ya a sus 40 y tantos no iba a emborracharse e ir manejando en la moto, eso lo hacía de joven y sólo. pero ahora con Pablo no iba a ponerlo en riesgo a ese pendejo malcriado de 18 años... cuando ambos estaban listos eran las 00:40, salieron del hogar de los Aimar para dirigirse a la moto. el menor tenía puesto un crop top de camisa blanca junto con unos jeans anchos q le quedaban a la cadera dejando ver el elástico del boxer y una cadenita dorada adornando su abdomen sin olvidar q estaba medio (bastante) alegre por toda la botella q había tomado.