Traicionado

Capitulo 5

Reencuentro con viejos amigos 

Narra la Narradora

Percy ya sabía que iba a responderles a esos dioses, el sabía que la propuesta era muy buena para rechazarla y al menos los primordiales parecían sinceros a diferencia de los dioses, aunque no se fiaba del todo sabía que tenía que aprovechar la oportunidad además que podría ver a sus amigos caídos, el estaba tentado y sabía que debía hacerlo así que mantuvo su postura mientras miraba a los dioses que estaban en la sala, el joven semidiós miro a los dioses viendo sus reacciones notando que Caos y Orden eran los únicos a los que no podía darse cuenta sus emociones pero igualmente el ya tenía su respuesta pensada por lo que les dijo:

-Acepto el trato- dijo Percy sin dudarlo

Los dioses hicieron el juramente de cumplir su parte y no traicionar al mestizo, a lo que este les devolvió el acto jurando sobre Estigia que cumpliría su parte también algo que los dioses hizo que sonrieran al ver a un joven tan honrado como el, Caos se levanto de su trono junto a Orden y se acercaron a Percy, una vez que ellos dos estuvieron enfrente del joven semidiós se pusieron en la forma de dos mortales comunes y corrientes para estar a la altura de Percy, este se sorprendió ante esto y Orden le dijo:

-Bienvenido Perseo Jackson, vencedor de miles del monstruo, vencedor de titanes, combatiente de Gigantes, vencedor de Gaia y Cronos, guerrero del Olimpo y sobreviviente del Tártaros, y sobretodo nuevo general de las fuerzas de Orden y Caos- dijo Orden sonriendo

Percy se sorprendió ante sus títulos sobretodo porque era el general de las fuerzas de esos dos dioses primordiales, el no se esperaba eso la verdad en ese momento Gaia bostezo y dijo que se iría a su sueño nuevamente que si la necesitaban la llamaran, Urano se fue también al igual que el resto de los dioses dejando únicamente a Tártaro, Nix, Caos y Orden en la sala junto al semidiós.
Entonces en ese momento la diosa de la oscuridad se despidió diciendo que volvería a su mansión pero antes de irse le tiró a Percy un libro sobre perros del infierno para así el supiera como cuidar bien a la señorita O'Leary.

-Bueno Percy vamos a buscar a tus aliados?- le preguntó sonriendo- ya pensaste a quienes les vas a preguntar?-

-Si ya tengo una gran idea de quienes quiero a mi lado- le dijo Percy seguro

-Cuéntame no me dejes en ascuas- le pidió sonriendo

Al semidiós le sorprendía la actitud del dios primordial del Tártaro, ya que no se imaginaba que un lugar tan temible tuviera a un dios el cual era bastante amigable y actuaba como un chico de su edad cualquiera aunque el el semidiós se acaba de dar cuenta que Tártaro estaba en una forma humana que parecía ser un joven de su edad, este le explico que siempre se sintió como un joven y prefiere esa forma y actuar así a pesar que debería ser un dios temible, a lo que Percy sonrió pensando que podrían ser buenos amigos pero igualmente se dirigieron al inframundo a la zona de los Campos Elíseos para encontrar a sus amigos para reclutarlos.

-Como entraremos allí sin que nos echen porque yo estoy vivo y no creo que dejen salir sus almas de allí- le pregunto Percy curioso

-Nuestra presencia no será detectada, la estoy bloqueando y también lo haré con tus amigos, además que me deben favores por aquí- dijo sonriendo- además nadie se atrevería a retarme al fin y al cabo soy el mismísimo Tártaro, dios de la prisión de los monstruos, titanes y gigantes- dijo con un voz tenebrosa 

Percy asintió en compresión y caminaron por el inframundo hasta llegar a los Campos Elíseos donde al llegar allí Percy vio que ya estaban cerca de llegar, ahora el tenía que entrar en estos y apresurarse para no quedarse atrapado en la tentación de quedarse allí a lo que el semidiós dijo que lo haría, por su lado el dios se quedo afuera bloqueando la presencia de Percy para que nadie los detectara o supiera que este ya había escapado del Tártaro, aun nadie debía saberlo.
El dios se quedo ahí aburrido esperando mientras que el semidiós se adentro a ese paraíso dejando a Tártaro preguntandose como es ese paraíso pero bueno el se quedo afuera esperando.