El Bosque

Capítulo 7.

Me acababa de despertar, noté que me encontraba totalmente sola, no estaba Lindsay, mucho menos Landon.

Aún seguía tendida en la cama, no quería levantarme, tenia una migraña intensa, y no recordaba del todo los hechos ocurridos el día de ayer, mejor dicho, no recordaba nada.

Al cabo de un rato, alguien tocó la puerta.

-Pase-. Dije. Tenia la voz un poco ronca, y me incorporé en la cama con pesadez.

-Buenos días, preciosa-. dijo sonriéndome.

"¿Que onda con los buenos días?, tengo un dolor insoportable de cabeza y ganas de seguir durmiendo".

-Eh, buen día, Niall.- dije fingiendo una sonrisa. La verdad es que lo odiaba un poco por hacerme levantar.

En ese momento tenia un leve deseo de que fuese Landon el primero en darme los ''Buenos Días''.

-¿Cómo amaneciste?.-Sonrió de nuevo, aún estaba parado en el marco de la puerta.

-Dentro de lo que cabe, estoy bien, o eso creo.-hice una pequeña sonrisa que pareció más una mueca.

-Que bueno, eso es genial.

Por unos instantes, parecía que estaba analizándome con la mirada.

Eso fue incómodo, por suerte, aun traía la ropa del día anterior.

Luego de unos minutos de silencio incómodamente raro, Niall se animó a hablar:

-¿Quién era aquel León con el que estabas ayer?

Cuando Niall hizo esa pregunta, cientos de imágenes empezaron a bombardear mi cabeza. Recordé todo lo ocurrido el día anterior, las sombras, Otis, y lo mas importante, las sombras atacando a Otis y yo curandolo. Espera, ¡¿Qué?!

Recordé que había sido Landon quien por alguna razón me había traído a la recamara, y se había quedado conmigo. Al parecer mientras pensaba se me notaba un poco aturdida.

-Hey preciosa, ¿te pasa algo?-. preguntó Niall.

-Niall, necesito que te vayas ahora, quiero estar sola, por favor-. dije. Traté de no sonar ruda, me sentía mal.

-¿Sucede algo?-. preguntó confundido.

-Nada, solo quiero que te vayas, necesito tiempo para pensar en todo lo que ocurrió ayer.

-Está bien, Merry, pero si necesitas algo me llamas ¿Ok?-. dijo y asentí.

Cuando Niall se retiró me tiré de espaldas en la cama y en voz baja dije: -Dios, ¿qué pasa conmigo?, ahora si no se quien soy en realidad, qué hago aquí, en este refugio, en este bosque, si Landon tenia la intención de ayudarme a salir de aquí, lo hubiese hecho hace tiempo, ahora no se si esas personas que me han ayudado, lo hacen por algún interés, o porque de verdad quieren hacerlo.

Me sentía más desconcertada que nunca, pero a la vez me sentía engañada, sentía que esa amabilidad que los Maslow tenían conmigo era puro teatro.

Pero bueno, no podía juzgar sin saber, debía enterarme de lo que en verdad estaba pasando, ellos debían saber quien era y que hacía allí, cuál era mi propósito en ese lugar, y Landon debía explicarme por qué simplemente no me mostró la salida de este bosque.

Ese día estaba dispuesta a dar todo por nada, solo me tenían que responder algunas preguntas, tan simple como eso. Estaba dispuesta a hacer que me contaran toda la verdad, con la esperanza de que esa verdad tuviera respuesta a todas mis preguntas, ya que cada vez se volvía más y más necesario que las respondieran. Pero tenia que tener mis pasos fríamente calculados, no podía entrar e inesperadamente exigirles que me contaran todo.