Naruto: La Leyenda de Chiba Volumen 11 - 12

Capítulo 2211 - 2220. La Leyenda de Chiba

Capítulo 2211. Puntos clave

"Señor Orochimaru, esto es información sobre Hayato Ichiba."

En la puerta de la oscura cámara secreta, el hombre vendado echó un vistazo a Orochimaru, que estaba a punto de abrir la puerta, y se inclinó para entregarle el pergamino que tenía en la mano.

"Mmm..."

Ante esto, Orochimaru echó un vistazo al pergamino, una emoción indescifrable cruzó por sus ojos. Su mano, que se extendía instintivamente, tembló ligeramente y se detuvo a pocos centímetros del pergamino antes de finalmente tomarlo.

"Chirrido."

Luego, abrió la puerta y entró.

"Orochimaru, ¿estás listo de una vez por todas? Ya no tengo paciencia para seguir esperando. Solo quedan cinco días para el examen de Chūnin, y nos llevará tres días llegar a Konoha desde aquí. Contando el tiempo de preparación, si no empezamos ahora, será demasiado tarde."

Justo al abrir la puerta, y antes de dar un paso, una voz profunda surgió desde dentro, cargada de impaciencia y descontento.

La voz provenía del único hombre sentado al lado de una larga mesa en la cámara secreta, un hombre con un sombrero de Kazekage, que había dejado de golpear la mesa.

¡El Cuarto Kazekage, Rasa! 

"Oh, ¿queda solo cinco días?"

Al escuchar esto, el rostro de Orochimaru no mostró ninguna reacción, manteniendo su sonrisa maliciosa mientras entraba, sin ninguna pausa, vacilación o prisa a pesar de las palabras impacientes e incluso ligeramente enojadas del Cuarto Kazekage.

"¿Realmente tienes intención de cooperar?"

Viendo a Orochimaru tan tranquilo, como si no tomara en cuenta sus palabras, el Kazekage apretó su mano que había dejado de golpear la mesa, y una voz ya teñida de ira brotó de su garganta.

Si no fuera porque solo este hombre tenía la fuerza suficiente para cooperar, ¡nunca se asociaría con este sujeto difícil! Siempre así, misterioso, como si todo estuviera calculado, y sin poder leer nada de su eternamente sonriente y escalofriante rostro.

Sumado a esta lúgubre instalación secreta.

Siempre tenía la sensación de que el peligro lo rodeaba.

Ahora también entendía por qué Ebizō se había opuesto tan firmemente a cooperar con Orochimaru.

Este Orochimaru nunca parecía brindar una sensación de seguridad, ya fuera enemigo o aliado.

Pero hay que decir que la influencia de Orochimaru es considerable. A la luz del día tiene la aldea oculta del Sonido, aunque no numerosa, su fuerza es considerable entre las aldeas más pequeñas. En la sombra, también tiene un ejército poderoso, también considerable en el lado oscuro.

Para llevar a cabo su plan, Orochimaru es realmente la primera opción como aliado.

Pero ahora, Rasa empezaba a arrepentirse. Viendo a Orochimaru de esta manera, no sentía en absoluto que Orochimaru diera importancia a este asunto.

O, dicho de otro modo, no daba importancia a su lado.

Tampoco podía confiar en alguien así.

En medio de estas palabras, Rasa de repente se arrepintió, lamentando haber cooperado con Orochimaru. Ahora siempre tenía la sensación de que estaba siendo consumido por el otro.

La actitud despreocupada de Orochimaru, si se hubiera percibido desde el principio de la cooperación, no estarían en una posición tan pasiva ahora, escondidos en la base secreta de Orochimaru esperando el momento adecuado.