Libros

felicidad

La biblioteca seguía siendo el escenario de su historia, pero esta vez, después de haber cruzado el umbral de la intimidad, las cosas eran un tanto diferentes. Momo, apenada por la noche anterior, hojeaba un libro con una concentración que solo era interrumpida por las bromas ocasionales de Izuku.

Izuku, disfrutando de su pequeña victoria, no perdía oportunidad de molestar a Momo con insinuaciones sobre lo que compartieron —. "¿Qué tal dormiste, Momo-chan? Yo tuve sueños muy interesantes".

Momo, sonrojada hasta las orejas, murmuró un: "Deja de molestar, Izuku" —, pero su mirada revelaba cierta complicidad.

En ese momento, la puerta de la biblioteca se abrió con fuerza, y Katsuki Bakugou entró seguido de su novia, Ochaco Uraraka. Katsuki, con su característico temperamento explosivo, exclamó: "Deku, ¿qué diablos hiciste anoche? Me enteré de que la biblioteca ahora es tu nidito de amor
¡Que asco!"

Izuku, con una sonrisa juguetona, respondió: "Oh, Kacchan, simplemente estamos explorando nuevas formas de disfrutar la literatura".

Ochaco, riendo, le dio un golpe en la cabeza a Katsuki —. "Déjalos en paz, Katsuki. Cada quien tiene su manera de pasar el tiempo".

Momo, apenada por el comentario de los chicos, al ver a Ochaco, se sintió aliviada por la distracción —. "Hola, Ochaco. ¿Cómo estás?"

Ochaco, con una chispa curiosa en los ojos, respondió: "Bien, bien. Katsuki y yo estábamos por aquí y pensamos pasar a saludar. Parece que llegamos en un momento interesante".

Katsuki, con su mirada afilada, observó a Momo e Izuku —. "¿Y bien, Deku? ¿Cómo va todo con la Princesa de la Literatura?"

Izuku, con una risa burlona, replicó: "Todo va de maravilla, Kacchan. Al menos no necesito un mapa para encontrar la casa de mi novia".

Momo, sorprendida por la afirmación de Izuku, lo fulminó con la mirada, pero Izuku solo sonrió desafiante.

Katsuki, soltando una risa estruendosa, exclamó —. "¿Novia? ¿Desde cuándo, idiota?"

Izuku, encogiéndose de hombros, respondió —. "Desde hace poco. Momo-chan y yo decidimos dar ese paso".

Momo, aún procesando la noticia que Izuku soltó tan casualmente, no pudo evitar sonrojarse aún más.

Ochaco, emocionada, exclamó: "¡Eso es genial! ¡Felicidades, chicos!"

Katsuki, con una expresión de incredulidad, miró alternativamente a Izuku y Momo —. "¿En serio son novios? ¿O es otra de tus jodidas bromas, Deku?"

Izuku, levantando una ceja, respondió —. "Puedes preguntarle a Momo si no me crees, Kacchan".

La tarde avanzaba en la biblioteca, y la conversación animada continuaba. Ochaco y Momo intercambiaban risas, compartiendo anécdotas sobre sus experiencias en la biblioteca y comparando los distintos gustos literarios que tenían.

Katsuki, aún incrédulo ante la noticia de la relación entre Izuku y Momo, murmuró para sí mismo —. "¿Deku, novio? Nunca pensé que vería el día".

Izuku, divertido, le lanzó una mirada pícara —. "Las sorpresas no dejan de llegar, Kacchan. Quizás deberías considerar encontrar a alguien que te soporte".

Katsuki, bufando, le respondió: "No necesito a nadie para soportarme, idiota".

"¿Así que no necesitas a nadie, eh, Katsuki Bakugou?" —. Una voz detrás de Katsuki lo hizo palidecer.

"¿O-ochaco?" —. Katsuki se dio la vuelta lentamente mientras sentía como su alma abandonaba su cuerpo.

"Ven aquí, mi amorcito..." —, Ochaco alzó su mano hacia Katsuki con una sonrisa para nada espeluznante y un aura terrorífica rodeándola por completo.