final

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Le habría gustado terminar de contar la historia diciendo que la despedida fue incluso más memorable que todo lo que sucedió el fin de semana, pero no fue así.

Trabajó la mayor parte del viaje de regreso mientras que Silas dormía y despertaba por ratos para ver qué estaba haciendo. Para cuando consiguió una mayor parte de las cintas de Silas, entonces descansó junto a él.

Hasta que Jeff azotó la puerta al aterrizar, haciéndolos saltar de la cama como si hubieran estado haciendo algo malo. Los dos intentaron tener un momento a solas, pero al parecer había una camioneta esperando por Silas y otra que llevaría a Jordan a su apartamento.

Era como si todo estuviera a favor de mantenerlos separados y arruinar una perfecta despedida.

"¿Puedo enviarte un mensaje más tarde?" Silas lo detuvo antes de dejarlo abrir la puerta. Lo miró profundamente con sus ojos azules todavía hinchados de dormir. El cabello revuelto y el olor a comodidad familiar lo atraparon con fuerza. Jordan se recordó una vez más que era solo humano y se había acostumbrado terriblemente a estar cerca de él. Por lo que lo abrazó con fuerza, envolviéndolo con ambos brazos y metiendo la cabeza en el hueco de su cuello. Silas lo sostuvo de inmediato, frotando las manos en su espalda y hombros. "Sé que vas a estar ocupado, pero quisiera mantenerme en contacto... si eso está bien contigo."

Jordan cerró los ojos con fuerza. Sus palabras eran tan reconfortantes como dolorosas.

"Solo hazlo si no tienes nada más que hacer," contestó con la voz ahogada en su hombro. "Gracias por..."

"Continúa."

Se rió, empujando sus cuerpos juntos. Dios, iba a extrañarlo terriblemente. 

"Gracias por hacer tiempo en tu fin de semana para mi. Me divertí mucho."

Silas se acurrucó contra el, soltando una risita. "Si lo hiciste, entonces, contesta mis mensajes." Besó su sien y suspiró. "No me ignores, por favor."

"Está bien. Debes ser como un molesto y pegajoso ex." Silas se rió, y no lo negó, lo que también lo hizo reír. Iba a estar repleto de trabajo sin fin, pero su corazón todavía se hinchó con algo parecido a la esperanza. "Intentaré responder tan pronto como pueda."

Jeff tocó la puerta otra vez. "Chicos, es hora de irnos. Silas, tenemos una reunión."

Lo vio suspirar. "Quieren verme para un papel en una serie. No estoy muy emocionado, pero supongo que debo ir."

"Sí, buena suerte con eso."

Dio un paso atrás y guardó las manos en los bolsillos mientras lo veía. Silas apenas parpadeó, sus manos apretadas en puños delante de su cuerpo y la tensión en su mandíbula le hacía lucir como si se estuviera conteniendo de algo.

Jordan colocó la mano en la perilla de la puerta y esperó unos segundos. ¿A qué? No estaba seguro, pero lo ansiaba con cada músculo en su cuerpo que sucediera. Silas le dio una pequeña sonrisa y guardó las manos en los bolsillos de su chaqueta.

Jordan asintió y abrió la puerta sin decir algo más. Jeff tenía el teléfono en su oreja y solo le dio una sonrisa antes de decirle qué auto lo esperaba, antes de tomar a Silas y llevarlo a su camioneta.

Lo vio una última vez mientras esperaba que subieran su equipaje en el auto. Silas lo miró también sin verse particularmente feliz antes de entrar a la camioneta.

Hubo un extraño sentimiento que se alojó dentro de él por el resto del día desde que llegó a su solitario apartamento y cuando fue a la oficina. Le tomó varias horas descubrir lo que era entre trabajo y ver videos, hasta llegar a casa otra vez y ver un solo mensaje de Silas en su teléfono preguntándole sobre su día.

[gay] one week - historia cortaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora