Rude! (yeongyu)

Mayores de 18

Las luces en la pista de baile eran cegadoras.

Beomgyu bailaba tranquilamente sorbiendo su bebida, tragó de frutos rojos y vodka que estaba delicioso. Se encontraba ligeramente sonrojado por el alcohol, pero no borracho.

En ese momento estaba acompañado de Huening Kai, su amigo de la infancia, y su novio, Yeonjun, quien estaba sobrio porque debía conducir.

No estaba familiarizado con la canción sonando, pero se estaba divirtiendo igualmente. Una pequeña sonrisa dejó sus labios al sentir como Yeonjun lo rodeaba con los brazos por detrás y le dejaba un pequeño beso en el cuello.

—No coman frente a los pobres.—Dijo alto Huening Kai para que pudieran oírlo por encima de la música.

La pareja río.

Cuando Beomgyu volteó para ver a su novio, quedó perdido en el rostro atractivo y ojos expresivos que este tenía.

Casi se le escapa un suspiro.

—¡Yeonjun! ¿Eres tú?—Una voz femenina interrumpió su momento romántico.

—¿Yeji?—Dijo su novio al reconocer a la pelirroja.

—Oh por Dios, ¡si eres tú! ¡Te extrañé!.—La chica lo tomó del brazo y lo atrajo a un abrazo, sorprendiendo a ambos.

Beomgyu dejó ver una mueca de molestia, mientras Yeonjun reía con incomodidad.

—Ah, es bueno verte, Yeji, ¿cómo te va?

—Excelente, pero mejor ahora que por fin te veo de nuevo.—Ella rio de forma coqueta, Yeonjun parpadeó sorprendido.

—Que bien, oye, este es mi novio, Beomgyu.—Tomó la mano del castaño que estaba mandando cuchillos con la mirada a la chica.

La sonrisa de Yeji cayó.

—¿Novio?

—Así es.

—No entiendo.

—Pues lávate los oídos si no escuchas bien.—Yeonjun se sorprendió al escuchar esas palabras de su lindo novio.

La pelirroja lo miró molesta.

—No sabía que eras gay.

—Estaba fuera del clóset en la universidad, Yeji, tal vez no me prestabas atención.—Rio Yeonjun, sosteniendo las caderas de su novio que parecía apunto de taclearla.

—Te prestaba muchísima atención, sabes que te invité a salir varias veces.—Negó.—Al menos ahora tiene sentido porque me rechazaste y..

—Si, bueno, fue hace mucho tiempo.—Interrumpió Yeonjun.—Fue bueno verte, Yeji, cuídate mucho.

La pelirroja quedó con la palabra en la boca mientras Yeonjun arrastraba a Beomgyu hacia el lado opuesto del lugar. Huening Kai estaba simplemente sorprendido de lo que estaba presenciando.

Beomgyu maldecía en voz baja a la pelirroja mientras Yeonjun lo llevaba a una esquina despoblada donde a penas se escuchaba la música.

—¿Qué fue eso? No eres celoso.

—¡Ella te tocó! ¡Estabas abrazándome y te agarró y te separó de mí! ¡Y si no se cuida le voy a arrancar esos pelos de zanahoria malteñida que..!

—Oye, bebé.—Dijo apoyándose en la pared y atrayendo a su novio hacia si mismo.—Si vas a hacerme una escena que sea una para mayores de 18, ¿si?—Susurró cerca de su oído, haciendo estremecer al castaño.—Vamos a casa.

Beomgyu intentó pensar en algo que no fuera el delicioso olor de su perfume.—Kai. Huening Kai. Lo dejamos en la pista.

—Lo dejaremos en su casa de ida.

Beomgyu asintió.

Y se dejó arrastrar por su novio una vez más.