ULTRAVIOLETA || Pedri • Gavi

06. ¿Quién va follar a quién?

j o r n a d a 3
FC Barcelona 2 - 0 Real Valladolid
Minuto 43'

Por encima de las gradas del Camp Nou aún podía ver los destellos de luz dorada del atardecer al filo de la extinción como reflectores apuntándole directo a donde debe ir, donde debe pararse y hacer su acto tal cual artista frente un teatro hambriento de espectáculo. Desde el lateral derecho las piernas veloces de Ousmane conducían hasta el campo rival viendo el espacio en el punto penal.

El canario llegó justo a patear el esférico sin pensárselo dos veces ante la defensa rival que solo lo observó pasar mientras él seguía la pelota como si quisiera entrar con ella hasta la red. La sangre en su cuerpo se sentía efervescente y burbujeante alimentada de tanta adrenalina al girarse para unir sus manos con quien estuviera más cercano. La mano fuerte de un sevillano efusivo llegó para deslizarse por su brazo hasta estrujarlo entre sus brazos sintiendo sus pechos retumbantes golpetear uno contra otro con esas camisetas húmedas esculpiendo sus cálidos cuerpos.

Esto era la gloria. Así sabía para Pedri que se dejaba consumir por las ovaciones y el rugir de ese estadio bajo el cielo pintado de tonalidades de oro. Sin perder la oportunidad levantó sus dos manos a su rostro haciendo círculos con los dedos para llevárselos a los ojos sin despegarle la vista al firmamento esperando que su padre lo esté viendo en ese momento haciendo sus gafas.

El extasis le siguió al vestuario durante el descanso complemente concentrado en volver a la cancha y terminar de lapidar al Valladolid. Puede ver a todos igual de enchufados una vez que regresan al césped con una energía inagotable. Los visitantes se vieron abrumados por la ola azulgrana que no dejaba de avasallarles atacando por todos lados incluso cometiendo el error de un autogol. Pero estaban destinados a errar ante un Barcelona hambriento de más y más. Desde la jornada pasada que golearon a la Real Sociedad 4-1 decidieron que deben repetirlo o mejorarlo. Entrar en esa dinámica de dominación, de demostrar poder y aplastar a todo aquel que se les cruce.

Pedri en lo personal estaba decidido, motivado por jugar los 90 minutos sin pensar en descanso o fatiga, disfrutando de la tensión de sus músculos, cada vez empujando más, apretando más, corriendo más, gritando más. Para cuando el encuentro terminó en un 4-0 y escuchó el silbatazo indicándole que se detuviera aún sentía la sangre bombeando por sus venas siendo la única sinfonía que podía escuchar. Los demás ruidos estaban muteados, paseaba por los pasillos llenos de gente sin voz, sintiendo sus abrazos y palmadas en su cuerpo entumecido sin prestarles atención, porque aún la sentía, la adrenalina susurrándole al odio.

—Hey—La sensación de una palma cálida sobre su espalda le hizo salir de su cabeza al cerrar su casillero. Ni siquiera se giró sintiendo esa presencia tan familiar sobre él.—Nos vamos a reunir en casa de Ansu para cenar.—Siguió guardando sus cosas en el pequeño bolso que siempre lleva hasta que en su visión se interpuso una pequeña sonrisa curiosa.—¿Vienes?

—Ya tengo planes.—Al decir aquello notó que otros jugadores alrededor le miraron igual de intrigados que Gavi, pero en ese momento no le importaban las miradas.

—Oh—El andaluz soltó sin saber realmente que responder al recibir una respuesta inmediata y tan tajante.—entonces...

—Nos vemos.—Le ahorró el esfuerzo de seguir pensado en cómo llevar la conversación al cortarla de una y terminar de recoger sus cosas.

—Vale.—Fue lo único que le salió al ver cómo se iba a prisas hacia la salida sin mirar atrás ni por asomo dejando a Gavi de pie algo desconcertado y sin saber que acaba de suceder.