09. Aún siento el calor

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[...]
"Imagínate ser su hijo."

Una solitaria pelota rodaba por la pedrería de la plaza principal en el pueblo de Los Palacios y Villafranca hasta los pies de un niño sentado en una banca pegado al móvil. Gavi solo hizo un puchero al notar que Thiago no le prestaba atención ignorando el balón que le pateó.

—Para que me compre los últimos phantom, sí.—Decía sin mucha seriedad corriendo para sacar el balón de debajo de la banca

—La vida sería más fácil con un papá así.—Decía sin despegarle la vista a la pantalla y el propio Pablo se asomó para ver la imagen que observaba, era un post de Instagram de Gabriel, el hijo único de Ricardo sonrientes en Wembly posando con la orejona después de ganar la cuarta Champions en la final 2011 frente a Manchester United 3-1.

—Bueno, no puede ser tu papá pero te puede ayudar como uno.—Decía una vez que logró sacar la pelota y la abrazaba entre sus brazos.—Pero para eso tienes que convencer a tu mamá y venir conmigo a La Masía.—Hace unas semanas conocieron a ese entrenador que les prometió catapultarlos hacia su sueño. Volvieron a Sevilla por una última vez o por lo menos Gavi porque la situación familiar de su amigo es complicada con un padre perdido en los vicios y una madre que no sabe nada más que trabajar para mantenerlos, siendo el fútbol lo último en lo que piensan.

—¿Y sí le convenzo mejor a él de que sea mi padre?—Viéndolo tan decaído Gavi se acercó para abrazarlo pensando que realmente es una oportunidad de oro que hayan atraído la atención de ese hombre y que los saque de ese lugar.

—Ven conmigo.

[...]


Gavi tenía la mirada fija en ese antiguo post de Gabriel con el trofeo de la Champions en medio y su padre. Ahora que lo vio en persona después de tantos años tienen la misma sonrisa, igual de brillante y vacía. No lo había pensando, que su hijo tomaría las riendas del negocio después de Ricardo. Siempre pensó que no se llevaban del todo bien porque fue resultado de un matrimonio que terminó disolviéndose y el niño vivía bajo la custodia de su madre. Rara vez lo veía involucrando a su hijo en su trabajo, no solía llevarlo a ver los partidos, no lo inscribió a La Masía y ni siquiera le dejo convivir con los demás niños en la academia. Gavi le llegó a hablar una que otra vez, incluso recuerda que se lo encontró poco después de que Thiago desapareciera y sintió la necesidad de decírselo, de decirle las atrocidades que hace su padre, llegó a pensar que tal vez también se las hacía a él. Pero no, ese parecía un niño feliz.

Tal vez por eso Thiago también le tenía tanta envidia, él sí hablaba seguido con Gabriel por mensajes. Gavi no entendía por qué lo hacía, con que intención se hacía amigo de ese chico. Ricardo alguna vez incluso le regañó por estarlo invitando a los partidos sin que él se enterara hasta que lo veía ahí. En ese entonces no le había pasado por la cabeza la idea de que tal vez, solo tal vez, Thiago se estaba involucrando un poco de más en la vida de Ricardo y su familia. Para Gavi lo máximo que se podía sacar de su relación con ese hombre era verlo como un entrenador, padrino, prestamista, el demonio mismo, pero nunca un padre. Y no lo había pensado, porque nunca le preguntó, pero cuando accedió la madre de Thiago a enviarlo a La Masía estando sus padres tan ocupados ¿no estaba también la opción de tener la tutela del menor?

Un tutor legal, un padre.

—Gavi

Después de todo lo que les hizo, después de desaparecer así como si nada ¿Por qué? ¿Por qué apareció ahora? ¿Por qué sigue aferrado a esa familia? ¿Que hace con ellos? ¿Por qué sigue al hijo de Ricardo como hermano mayor? ¿Por qué fingió no reconocerlo? ¿Por qué habla de un supuesto padre enfermo? ¿Ricardo está enfermo? ¿Por qué conoce a Pedri? Por qué, por qué, por qué

ULTRAVIOLETA  || Pedri • GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora