Mi dolor

Nosotros

Después de un largo tiempo abrazados Blitzø sintió como las respiraciones de la loba eran más tranquilas, ahora soltando solo pequeños suspiros, beso su frente para darle más seguridad de que no se iría de su lado, provocando que la loba se aferrara más, pronto las respiraciones eran de tranquilidad y pequeños ronquidos comenzaron a salir, el diablillo la alejo un poco para notar que la loba ya estaba dormida, sonrió con calidez al verla tan tranquila, la tomó en brazos para caminar hacia el gran sofá de color vino, la acosto con cuidado de no despertarla, acaricio la mejilla que aun se encontraba húmeda por todas las lagrimas derramadas.

El dolor que su pecho sentía se alivio un poco al ver que su hija realmete lo quería, pero también se le encogió al verla llorar de ese modo por él, tal vez si había sido un egoísta pero se le podía culpar? No sabía, pero la vergüenza creció en él, quería disculparse con ella y decirle que había sido un error y que jamas quiso morir pero le creería esa mentira? Solto un suspiro al no saber que hacer con esa creciente vergüenza que inundaba su ser.

Como debía hablar de ahora en adelante con su hija? Que pasaría si esta les decía a Moxxie, Millie y Stolas donde estaba? Podría afrontarlos a ellos también? No sabía y le daba pánico pensar en que ocurriría después de ese día en adelante, aún no queria afrontar del todo su realidad.

Gracias a Satan sus pensamientos fueron interrumpidos por las voces de sus amigos que venían aparentemente discutiendo por el desayuno, su cuerpo se tenso al pensar que Husk correría a su hija en cuanto la viera sabia que habían tenido más de dos discusiones mientras aun permanecía en el hospital su cuerpo actuó por instinto posandose frente a ella como si de un escudo se tratase

-Ya te dije Husky si vas a tomar hazlo después del desayuno-

-Ya te dije que tenia sed, no puedes culparme-

Sonrío al escuchar la excusa de su amigo, noto que la cara de la araña ahora estaba roja de la ira y que pronto iba a explorar y antes que de esto sucediera los detuvo

-Chicos por favor no quiero presenciar peleas maritales-

Angel lo miro aún con el rostro enrojecido por la ira pero no dijo nada más, solto un suspiro lleno de frustración parecía que aun tenia cosas que soltar y volvió a tomar aire dispuesto a maldecir al gato que solo se sentó en unos de los sofás sin prestarle más atención al demonio araña, Blitzø noto que Angel no aguantaría más las ganas de gritar

-QUE DIABLOS TE...-
-Shhhhh o vas a despertar a mi hija-

Blitzø lo interrumpió con un pequeño tono de reproche, Angel fijo su vista en el con sorpresa notando que detrás de él acostada en sofá se encontraba la loba

-Y ella que hace aquí? No me digas que la buscaste Blitzø-

Reprocho Angel mientras miraba con disgusto a la loba y se acomodaba en las piernas del gato quien se acomodo en el sofá para que la araña pudiera estar comodo

-No...cuando desperté ella ya estaba aquí-

Contó mientras la miraba de reojo no quería que su hija sufriera del desprecio de sus amigos solo por una decisión que el tomó, a base de los tratos de su familia si pero aún así había sido su decisión

-Blitzø sabes que te apoyo en todo, pero ella junto con los demás fueron...-

-Lo se Angel... pero...-

El diablillo se quedó callado mirando ahora a la nada, sabia el por que había llegado ahí pero amaba a su hija y a su familia, por muchos insultos que recibía los amaba y era por eso su decisión para no causarles más problemas con su "amor enfermizo" tal vez aun nadie entendía el como se sentía, su vista regreso a ambos demonios cuando escucho como uno de los cajones de la sala era abierto por Husk quien sacó un puro para prenderlo y comenzar a fumar