re loca - capítulo 35

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22 de mayo 2024, Mallorca, España.

Narrador.

—Santi y Azul la cortan por favor, basta de gritos!— los menores salieron corriendo hacia la otra habitación, asi estaban hace aproximadamente una hora y Alina ya estaba a punto de estallar.

Estaban en España, Emiliano termino de jugar la premier unos dias atras y lo primero que quiso hacer fue salir unos días de Birmingham, Alina habria preferido un clima más calido o ir a Argentina pero no habia forma de hacer cambiar de opinión a Emiliano.

Afuera llovia, hacia un poco de frío y para colmo los chicos de estaban portando bastante mal, Alina habia entrado a los seis meses de embarazo y ya tenia la misma panza que tenia de Azul a los nueve meses.

—No hay nada abierto, reserve para cenar en un restaurante que esta a 5 cuadras, pero no consegui nada para merendar— Alina miro hacia la puerta cuando Emiliano ingreso a la casa, estaba un poco mojado y trajo consigo un aire fresco que le hizo poner piel de pollo a Alina.

—Emi, podes hablar con los chicos, que dejen de gritar por favor—

—Pero no estan gritando Alina— respondió el, ella le dijo que bueno, que estaba bien.

Hace días Emiliano habia decidido dejar de seguirle la corriente a Alina con sus caprichos y exigencias, ahora era ella contra todos, el lo tomaba como un capricho que quizás si lo sea pero a veces el oriundo de Mar del Plata se olvidaba que estabs embarazada de gemelos que alteraban totalmente su humor poniendola en hipersensibilidad ante cualquier boludez.

—Mañana quiero ir al café que esta a dos cuadras de acá viste?, leí algunos comentarios y dicen que tienen al mejor barista de España, puede ser una exageración o no?— hablo la castaña entre risas.

—Pero mañana habiamos arreglado para ir con los chicos a unos juegos— Alina se desgano cuando escucho que habia otros planes.

—Mmm bueno, entonces cuando salgamos de ahí podemos ir o no?— pregunto sonriendole a su novio.

—No creo que sea un lugar para que esten los chicos, sabes que cuando salen se portan mal— Alina asintió.

—Bueno entonces voy sola amor, vos te venis con los chicos y yo voy, total esta aca a dos cuadras no pasa nada— empezo a ojear su celular para ver los horarios.

—Y por que no mejor lo dejas para otro día? no quiero que andes sola y menos con la panza—

—Bueno, esta bien— dijo ella ya rendida por las negativas que habia recibido.

Se acostaron temprano porque no habia nada que hacer con la lluvia.

Alina se levanto nuevamente a la madrugada para buscar que comer, no habia nada dulce, hasta que reviso en el cajón de Emiliano y encontro un alfajor de chocolate.

—Que estás haciendo?— entredormido Emiliano prendio el velador y vio a Alina sentada como indiecito a su lado comiendo.

—Queria algo dulce— respondió ella, Emiliano negó y se dio vuelta poniendose la almohada en la cabeza.

—Te dijo la doctora que no podes comer tantas cosas dulces, no lo entendes?—

—Pero hace más de una semana que no como nada amor, si ya no me llevo más tortas a casa, es un alfajorcito no más— dijo ella mientras acariciaba la espalda de su novio.

—Si vos decis— Alina terminó de comer, tomo un trago de agua y se acosto abrazando a Emi.

—Te amo papito—

DAYLIGHT - Dibu MartinezDonde viven las historias. Descúbrelo ahora