La Flor Del Faron Jeon

VII

Todos en el Palacio habían escuchado el intento de asesinato contra el Principe Kim Taehyung, todas en el harem habían usado sorprendidas, el Principe es muy dulce y amable así que no entendían quien quisiera hacer semejante pecado contra el esposo del Faraón Jeon.

Sabían perfectamente que un atentado como ese, es un atentado contra el Gran Horus Vivo, y ese pecado era pagado solo con la muerte por atentar contra el orden cósmico.

Tanto Omegas, Alfas y betas en el harén estaban molestos, como es que se atrevieron atentar contra la vida del peliazul? La adoración del Alfa, su más grande tesoro y su flor más preciada y perfecta.

Anat al escuchar los murmullos se preocupó y salió del harén en busca de la sierva a quien le dió el frasco, en cuanto llegó y la encontró, la acorraló

—Si alguien viene, yo no eh venido, no te he dado nada y tu y yo nunca hablamos ¿entendido?—su mano se dirigió hacia el cuello de sierva empezando a ahorcarla

La sierva con miedo asintió rápido e intentaba liberarse del agarre, Anat sonrió y la soltó

—Dime algo, ¿Cuántas gotas vertiste al maquillaje?

—S-seis

Anat ante ello sonrió, ella solo le había pedido que cierta dos, debido a que solo quería deformarle el rostro no matarlo. Ese líquido es como un ácido que quema la cara, pero con una dosis muy alta provoca una muerte segura.

—Es todo, recuerda que tú y yo no nos conocemos—salio de ese lugar con una sonrisa como si no hubiera pasado nada

Ella quería ser la afortunada que se case con el Faraón, ella merece ese puesto o eso es lo que ella cree.
Sus sentimientos por el Príncipe Jeon empezó a crecer desde muy niños y siempre le decían que de seguro ellos dos iban a terminar casados pero ahora resulta que llegó ese Omega a arruinar todos sus planes.

Y hará todo para que esa boda no se realice y no importa cuánto le cueste, al final sabe que Jungkook regresará a sus brazos y ella estará feliz de recibirlo.

Pov Jungkook

Me he despertado desde que el dios Ra empezó a subir al cielo, iluminando a su paso toda la ciudad de Egipto y el celestial rostro de mi amado Príncipe y dueño de este corazón.

A pesar de que el está dormido se ve tan lindo mientras descansa, su manía de abrazarme durante la noche, calienta mi corazoncito y sus labios formando un precioso puchero del cual me vuelvo deseo de besar hasta dejarlo sin aliento y dejar claro que solo me pertenece a mí.

En paz, así me sentía, y es que estaba sosteniendo a mi mundo entre mis brazos que ni si quiera me sentía abandonado, jamás pensé en caer tan fuerte por alguien pero luego vino mi Taehyung, bate sus pestañas coquetamente, ladea su cabecita como un cachorro bebé y abulta los labios, como un patito bebe; y entonces mis ojos lo contemplan y se me llena el pecho de amor y termino por bajar la guardia cuando se trata de mi más adorada flor.

Una flor a la cual dese cuidar y deseo mimar, es tan delicado como una flor y su aroma me envuelve y me desarma en tan solo unos segundo, poniéndome a sus pies para cumplir todos su caprichos y cada uno de sus deseos.

He escuchado a grande sabios decir ”Todo nace y se marchita“ todo menos mi devoción y amor hacia ti mi amado; porque que sería de mi sin ti? Que sería de mi sin poder sentir este sentimiento que mi alma anhela al tenerte? Simplemente sería una persona vacía.

Mis manos acarician con vehemencia la carita de mi amado mientras yo me pierdo en el mis pensamientos y el amor que eh profesado tenerle; no sé cuánto tiempo ha transcurrido desde que he estado admirandolo pero puedo ver cómo sus ojitos me quedan mirando con total confusión y ladea su cabecita intentado descifrar lo que estoy pensando y eso me saca una sonrisa