Veneno-Danilo Sanchez, fanfic.

Capítulo dos

Ya habían pasado tres años del día en el que ellos me, adoptaron por así decirlo.
Vivía en el mismo bloque que Danilo, él era el que me pasaba a buscar para que los acompañe a verlos jugar, ahora no solo podía verlos de lejos, estaba cerca de ellos.

Había logrado amistades.

Eran ellos los que no tenían tiempo de estar sentados, eran muy activos. Si no estaban jugando a la pelota o estaban molestado a la gente del barrio. Cosas de niños.

Pero crecimos, yo crecí. No quería pasar mucho tiempo en casa, los hombres que entraban ya me miraban sin disimulo.

Por eso estaba casi siempre en la casa de Marta, ella prácticamente era como una mamá para mí. Me enseñó como valerme por mi misma y me mandaba a la escuela.

Carlitos y yo nomas íbamos, a Danilo no le gustaba estudiar, pero en el fondo sabíamos que era porque no tenía la oportunidad.

No era novedad ver a los tres subidos en alguna tapia o escaleras, molestando a la gente que pasaba.

-¿Ven a ese viejo ahí abajo?- señalaba con la cabeza Danilo.- Es re pajero, Dicen que una vuelta en la parada del bondi, se bajó las lompas y se lo mostró a unas pibas que había ahí.

Carlitos se reía, mientras yo reconocí al hombre parado, era uno de los que iba a mi casa.

Los dos empezaron a juntar saliva para tirarle al hombre en la cabeza.

-Mira que le tenes que pegar- se acercaron un poco más.

Comenzó a decir de calcular la velocidad y la trayectoria, cuando yo me comencé a reír, haciendo que el hombre se de vuelta.

Cuando esto pasó Danilo le escupió en la cara.

-¡La puta que te parió! ya vas a ver cuando te agarré.-Gritó el hombre enojado

Todo era risas mientras nos encondiamos de él.

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Consideraba que me iba bien en la escuela, me gustaba ir. Lastima que en mi año no había muchas chicas, la que más destacaba era Mariela, era bonita y tenía lindo cuerpo. La primera en tener novio, por eso todas nos acercábamos a ella para hablar de eso, después de todo, solo eramos unas adolescentes emocionadas.

A la salida, ella se fue a hablar con Carlitos, mientras que yo lo vi a Danilo sentado en una bicicleta.

-Danilo, ¿todo bien?-le pregunté mientras me acercaba.

-Todo bien, vine a buscarte-mientras me guiñaba el ojo, solo pude ponerme roja ante el comentario.

Antes de contestarle llegó Carlitos, venía con una sonrisa en la cara mientras que de lejos se veía a Mariela caminando.

-¿Todo bien?-le preguntó a Carlitos- Los vimos salir juntos con Mariela, te casa' con esa y sos otro.

-Están todo el rato juntos.-agregó yo-Le gustas mucho, Carlitos.

-Y esa bici'-preguntó, estaba intentado cambiar de tema.

-Es mía, la pagué con mi plata.-lo dijo re orgulloso, mientras movía el manubrio de la bicicleta para que la observemos bien.

Desde el otro lado de la cancha de la escuela, se escuchó un gritó. Era Hernan, con su grupito.

-Vamos chicos- quería que nos vayamos, no me gusta que se peleen ellos.

-¿Qué onda con la Mariela, ya le diste maza?-Preguntó con un tono de voz despectivo.

-Qué te importa a vos-era en vano que diga algo, lo mejor era irnos. Intenté empujar un poco con la mano a los dos para emprender camino.

-¿Sabías que fue novia mía, no? Boludo.-se oían las risas de fondo de su grupito.-Igual que lo va a ser la ojitos claros esa.

Solo podía ver como me señalaba con su dedo.

-¿Por qué no te rescatas salame?Le volves a decir algo a ella y te hago mierda sabes. - Danilo lo dijo con un tono de voz amenazador.

Solo podía observarlo, en serio ¿él haría eso por mi? solo mi corazón de adolescente puede sentir como late más rápido por el nuevo sentimiento que va naciendo.

Él era muy coqueto conmigo, pero yo era muy tímida como para contestarle de igual manera, me daba vergüenza.

-Mírala como la defiende, ¿es novia tuya acaso?

Cuando este le estaba por contestar ya Carlitos se adelanto parandole el carro.

-Esta dolido porque se fue conmigo.-Haciendo que nos riamos.

-¿Te olvidaste del cuatro a cero, puto?te cago a baile.- cerrando esa, interminable conversación para seguir el camino a casa.

Luego de eso, comenzaron a hablar de que habían asesinado a alguien en el barrio. Danilo dio la idea de ir a ver el cuerpo.

Yo no quería, pero no podía decirle no.

Al llegar estaba lleno de efectivos policiales y una ambulancia.

Había un cadáver tapado en el medio. Nos acercamos para verlo mejor.

-¿Ven el ojo como lo tiene?

-¿No está vivo, o si?-pregunté con miedo, tapandome la cara.

-Qué va a estar vivo, mira toda la sangre que hay-Para después él con su mano taparme el rostro. No quería ver esa escena.

Luego de eso llegó el papá de Carlitos, mandandonos a nuestras casas.

Danilo me acompañó hasta la mía, para luego ir a la suya.

Solo que no entré a mi casa, y fui directo a la casa de Marta, tenía clases con ella y no podía faltar.

Sin nota de autor.