Capítulo tres

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El fuerte reflejo del sol en la ventana me dio de lleno

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El fuerte reflejo del sol en la ventana me dio de lleno. Habían pasado ya un par de días desde que vimos el cuerpo tirado de "el licha". Era fin de semana ya, un descanso de las agotadoras clases que aún teníamos.

Como todo fin de semana era día de partido, los dos jugaban hoy. Y desde que los vi jugando en la plaza, casi no me perdía ningún partido, hoy no iba a ser la excepción.

Lleve mis cosas de tejer, para entretenerme mientras ellos jugaban. No me llamaba la atención el fútbol, no entendía mucho de él, aunque siempre Danilo tenía la paciencia para explicarme las cosas, no era buena intentando entenderlo.

Me gustaba como él se emocionaba hablando de algo que le gustaba.

Sentada en las gradas, terminando un gorro que había empezado no hace mucho, vi que estaba por terminar el partido.

Los dos siempre se lucían.

Pero vi que llamaban a Carlitos, me acerqué a ver que pasaba.

Lo estaban convocando a que juegue en "Argentinos junior", mientras ellos seguían en la platica, vi que una persona se alejaba de ellos solo.

Danilo parecía decepcionado.

-¿Qué pasó?-pregunté, no era normal verlo en ese estado, siempre estaba alegre con esa actitud altanera y coqueta.

-Nada, lo convocaron a Carlitos,-estaba esquivando mi mirada, lo tomé suavemente del brazo para que entienda que podía decirme lo que sentía-no entraba yo en esa conversación.

-¿Es bueno eso, no?-intentaba distraerlo con suaves masajes en su brazo-Debes estar re cansado, ¿quieres ir a algún lado?

-Obvio que es bueno eso, ya vas a ver que a mi me fichan de un club más grande-Mirándome con una sonrisa-¿Viste que te dedique un gol, no?

El momento que compartíamos en ese instante se volvía más fuerte. Me gustaba los momentos que teníamos así, me hacía fantasear con tener una historia romántica con él.

-Si lo vi, me haces poner roja.-dije tapándome el rostro, para que evite ver mi sonrojo.

-No te tapes, que me gusta ponerte nerviosa.-para luego agarrar él, mi mano que lo estaba acariciando-Vamos, después le aviso a Carlitos que nos fuimos.

Saliendo juntos del recinto tomados de la mano.

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Estábamos los dos sentados, en una plaza. Aún tomados de la mano, yo no quería soltarlo, él tampoco parecía querer hacerlo.

En el camino casi no hablamos, no era necesario, un silencio cómodo se formo entre nosotros. Me gustaba estar así.

Gire un poco mi rostro para verlo, topandome que él me estaba mirando.
Para romper el hielo comencé a hablar.

-Estuve tejiendo, mientras jugaban.-Comenzó a hacer pequeñas caricias con sus dedos en mi mano.

-¿Qué hiciste? La otra vez que nos hiciste medias, eran re calentitas. Me re gustaron

Saque de mi bolso, el gorro de lana aún a terminar de color azul.

-Estaba haciendo esto, aún no lo termino-mientras se lo mostraba él se veía curioso.

-¿Para quién es? es bastante grande para vos.

-Es para vos, Danilo. Lo hice azul porque me dijiste que era tu color favorito.

En ese momento ella no lo sabía, pero el corazón de ese adolescente comenzó a latir al mismo ritmo que el de ella.

Dos corazones se habían unido en gracia para amar.

No podía dejar de verla y sonreir. Un momento íntimo entre los dos surgió. Y con eso el agradecimiento del joven muchacho con un abrazo. Al cual fue devuelto por la otra parte.

-Te voy a sacar a comer, Mari.- dijo reduciendo más la distancia que los separaba- Cuando juegue en primera, vas a ver la vida que te doy.

Sacándole una risa a la muchacha. Haciendo que luego se pongan a jugar e imaginar la vida de él futuro jugador que tenia cerca.

Lamentablemente iba a quedar en un que pudo ser.

Lamentablemente iba a quedar en un que pudo ser

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Capítulo 3, espero les guste.
Avísenme si hay errores en el capitulo, gracias.

Veneno-Danilo Sanchez, fanfic.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora