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ㅡPero que... ㅡHanse tenía la boca totalmente abierta, no podía creer lo que estaba frente a sus ojos.

ㅡ¡¿Te gusta?! ㅡchilló un muy entusiasmado Hanse.

ㅡSí... es decir, te queda genial.

Hanse se giró rápidamente en dirección al espejo de cuerpo completo apoyado en una de las esquinas de su habitación. Le sonrió encantado al reflejo.

Hanse llegó por detrás y llevó una de sus manos a los cabellos contrarios, esos que antes eran de un brillante castaño. Ahora, sin embargo, relucían un vibrante azul eléctrico. Este nuevo color parecía que hacía resaltar las facciones de la carita del omega.

ㅡ¿Crees que a nuestras madres les agrade el color?

Hanse interceptó un atisbo de inseguridad en esa frase y quiso tener el poder para que el omega nunca la volviera a sentir.

ㅡClaro que sí, eres encantador con cualquier color de cabello.

ㅡEra algo que quería hacer hace tiempo y simplemente se dio la oportunidad.

El alfa no podía dejar de pasar sus dedos por las hebras viendo como estas cedían al tacto.

La puerta de entrada fue abierta, sobresaltándolos a ambos y haciendo que el suave aroma a caramelo se intensificara por los nervios que corrían en la mente de Hanse.

ㅡCreo que es momento de la verdad ㅡsentenció Hanse dirigiéndolos escaleras abajo.

La dulce voz de su madre pronto empezó a sentirse más cercana y eso hizo que Hanse afianzara su agarre en la mano de Hanse buscando un poco de contención inconscientemente.

Jennie saltó en su lugar cuando se percató de la presencia de sus hijos. Fue increíble como obtuvo la misma reacción tanto de él como de Hanse.

ㅡCachorro, tu cabello...

ㅡ¿Te gusta? ㅡHanse dejó que pasara sus manos por el mismo pero a la vez diferente carácter.

ㅡEs... wow, es decir... te queda estupendo, pero nunca creí verte con algo así ㅡambos omegas lucían igual de entusiasmados.

Hanse los veía aún desde la escalera, orgulloso de que Hanse siguiera sus instintos. El alfa tenía el pensamiento de que sentirse cómodo con uno mismo era lo más importante de todo. Si te dejas llevar por lo que los demás dicen o piensan de tu persona nunca podrás realmente estar conforme.

ㅡ¿Crees que a mamá le guste? ㅡahí estaba de nuevo la inseguridad filtrándose en sus palabras.

ㅡMientras a ti te guste y te sientas cómodo con el nuevo tú no debe importante lo que los demás opinen. Además, es cabello, si te aburres lo cortas y volverá a crecer como antes.

Hanse se abrazó con fuerza a su madre, hundiendo su nariz en la fuente de aroma en el proceso. Jennie siempre sabía que decir.

ㅡFamilia, ya llegué ㅡla voz de Rosé los interrumpió desde la puerta de entrada.

ㅡHola, mamá ㅡHanse se posicionó frente a ella de un salto.

ㅡWow... solo wow ㅡla alfa frenó sus pasos frente al más pequeño de los omegas que mordía su labio inferior señal de nerviosismo.

ㅡ¿Qué tal?

ㅡTe queda genial, muy tú.

Rosé revolvió su cabello, como las dos personas anteriores, y dejó un beso entre ellos.

ㅡSolo falta la opinión de Hyejin... ㅡmurmuró el omega.

ㅡCachorro, ya hablamos de esto, no necesitas la validación de nadie.

¿Se agranda la familia? | ChaennieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora