MI DULCE MAID

MI DULCE MAID CAPITULO 23 FINAL

//Días después, Kasandra se encontraba en su oficina en Le Grand Paris, se ocupaba revisando las finanzas del lujoso hotel desde su computadora, de vez en vez tomaba un sorbo de su refresco con sirop de grenadine, de pronto llamaron a la puerta –Adelante– Diría la azabache, la puerta se abrió y entro Nathalie; vestía un elegante traje sastre ónix con una blusa malva, le recibió su contraria con una sonrisa amable –Hola Nathalie, quieres un poco de sirop de grenadine– Dijo alzando su bebida y dando un sorbo, la peli teñida asintió y se sirvió ella misma –Anda siéntate, dime como van las cosas en el hotel, ningún desastre espero– Hablo curiosa, su contraria sacudió la cabeza y tras sentarse en una de las sillas frente al escritorio, tomo un poco de la bebida carmesí diciendo animada –Solo lo usual, una pareja de recién casados muy lujuriosa que pretendía dar rienda suelta a su pasión en el elevador; se les reprendió, un proveedor retrasado, pero por la noche entregara los vinos y no los necesitamos hasta dentro de tres días; así que está bien y ya cerré el trato con la compañía medica que buscaba usar las instalaciones del hotel para su aniversario//

–Gracias por eso, estoy muy ocupa– Suspiro aliviada Kasandra, la peli teñida le miro comprensiva –Cuéntame como te va, necesitas ayuda, Caline me dijo que expulsaron a Chloé por su comportamiento y a Marinette también por no asistir; lo cual es ridículo juzgando las circunstancias, cree que el Colegio busca distanciarse ante un posible escandalo– Su contraria suspiro –Gracias por el ofrecimiento Nathalie por ahora estoy bien, solo algo agotada, ya lidie con el Colegio Françoise-Dupont, mande a recoger los documentos de Chloé y Marinette quien está furioso es Gabriel Agreste; ya se divulgo la foto de su hijo con los pantalones orinados, fue una burla en varios tabloides y redes sociales y paso una gran vergüenza; le advertí que si continuaba fastidiando seria mi misión en la vida arruinarlo, ya dejo de molestar, gracias por decirme de sus secretos– Nathalie sonrió y se encogió de hombros –No fue nada el me la debía, me trato como basura varias veces...–

//Las dos rieron de buena gana, después Kasandra torció los labios y se veía inquieta, la peli teñida hizo un ademan con la cabeza instándola a desahogar sus tristezas//

–Toda esta desgracia causo que Chloé y yo nos llevemos mejor, desearía que no hubiera sido así, últimamente me busca para un abrazo y palabras de aliento, en ocasiones llora al dormir en la cama de al lado de Marinette, le pregunto si está bien, ella solo se hace la fuerte ¡"Me pregunto, será su otra yo la que estará aguantándolo todo"! no sé cuánto más logre soportar y si algo le sucede a Marinette, no quiero pensar en la reacción de Chloé, lo es todo para ella...– Kasandra dio un largo sorbo a su bebida, Nathalie suspiro diciendo esperanzada –Espero que todo mejore–

//Ya habían pasado más de un mes desde que Sabine Marinette y habían ingresado al hospital, Chloé se encontraba en su habitación de su novia como cada día desde que la encontró, justo ahora ocupaba el sofá que había movido hasta la cama de la azabache y le sujetaba la mano cariñosa; estando tan cansada recostó su cabeza obre su cama durmiéndose, cuanto tiempo había transcurrido, de pronto sintió suaves caricias en el dorso de su mano, al reincorporase vio despierta a Marinette, creyó que era un sueño; ya lo había tenido, parpadeo buscando disipar la ilusión que le dolía y que deseaba, pero la calidez de la sonrisa de Marinette le hizo saber que era verdad, rompió en lágrimas y se acerco a su novia y le beso; una caricia llena de desesperación, su contraria trato de abrazarle, sin embargo le dolió su cuerpo, gimiendo de dolor. Chloé asustada se hizo para atrás –Lo siento cariño, no te lastime... llamare al doctor– La ojizarca estaba por retirarse, cuando la mano de la azabache le sujeto –Quédate conmigo– Susurro, notando que la garganta le dolía, Chloé se acercó besándola otra vez. Entonces la mente de Marinette comenzó a percatarse de sus circunstancias, alarmándose