MI DULCE MAID

MI DULCE MAID CAPITULO 21

//Un mpm Erelis se detuvo cerce de vehículos de emergencias, bajaron dos hombres vistiendo ropas semi formal, el primero tenía una barba poblada y era delgado, quien le acompañaba parecía un poco amable, y regordete, cabellera cobriza y de nariz grande; las luces escarlatas y azures les molestaban desviando la mirada al dirigirse a los policías en la entrada del edificio –Soy el detective Jean Reno y mi compañero Gérard Depardieu, cual es la situación– De entre los tres oficiales uno respondió –Soy el oficial Robin Michel de la patrulla 307 nos llamaron por un posible 10-13, nos indicaron que habían escuchado gritos y disparos al llegar el sargento Belmont Durand tomo el mando y subimos al tercer piso siguiendo rastros de sangre, nos hallamos dos mujeres golpeadas; una de ellas con heridas de bala, la joven de nombre Marinette la acaban de trasladar al hospital la oficial Alice Bernard le acompaña, la otra víctima es la madre de la joven, se llama Sabine cheng la están bajando los paramédicos; sufrió un paro cardiaco hacia un momento, se preguntó en los departamentos cercanos, pero nadie quiere decir nada como siempre– el de ojos azules frunció la boca y los detectives asintieron//

–Aun lado– Escupió un paramédico mientras cargaba una camilla ayudado por su compañero y un policía –Como se encuentra– Interrogo el detective de delgado, su contrario negó con la cabeza –No pinta bien, perdió mucha sangre antes de que llegáramos, una de las balas hirió el hígado la otra se alojó en el pulmón, cuando la bajábamos sufrió un paro cardiaco, espero logre llegar al hospital–

//Los paramédicos se apresuraron y la ambulancia partió, seguida por una patrulla, los detectives subieron al departamento donde fue la agresión, dos policías cuidaban el lugar, tras identificarse les dejaron entrar –Los forenses a qué hora llegan– Escupió el hombre delgado, su compañero reviso su celular torciendo los labios –Dos horas, es una noche larga y aún no termina– Reviro pesimista, diciendo –Que piensas que paso aquí, no parece robo de drogas, eso deja robo o violación quizá ambos, y escalo a un probable homicidio– Su compañero se agacho donde había un charco de sangre y un trozo de espejo resoplando al comentar –Unos vagos buscaban divertirse y las victimas se defendieron, quizá uno de esos refugiados busco dinero fácil o castigarlas por usar pantalones y maquillaje; no sería la primera vez, esos malditos idiotas del gobierno y asociaciones civiles que abren las fronteras sin darse cuenta que reciben a muchos locos, criminales y terroristas...– Su contrario puso la mano sobre su hombro –Eso pasa seguido, ya me canse de escenas llenas de violencia y de crueldad, pero no lo digas si te escuchan pueden acusarte de discriminar y estupideces así, una cosa es la realidad y otra las tonterías que esos Woke piensan y creen que sucede, mejor ocúpate de solucionar este caso– Su contrario asintió, notando una pistola bajo una mesa esquinera se acercó iluminándola con la luz de su celular –Hallé una nueve milímetros, que el forense la fotografié antes que se asegure, no quiero líos con el fiscal y que el abogado de la escoria que hizo esto diga que la plantamos– Al mirar a su compañero le encontró leyendo varios documentos

–Gérard que estás leyendo– Indicaría curioso, el cobrizo le extendió las hojas y las comenzó a revisar –Que estoy leyendo– Refunfuño su contrario sonrió irónico –Los documentos son variados, los primeros ceden los derechos sobre algunas acciones de una empresa, los siguientes son seguros de vida y el beneficiario es un tal Tom Dupain, extraño no lo crees– Su contrario asintió siguiendo con la lectura, diciendo –Tendríamos que revisar, pero supongo el matrimonio no andaba bien– El detective cobrizo intervino– Digamos que el padre era el violento, su esposa e hija huyen, las encuentra y él o un cómplice las atacan, cobra el seguro y se queda con la empresa; arriesgado quizá todo depende de las finanzas y los problemas en los que se encuentre– Jean alzo la ceja y rasco su barba –Tiene sentido, teniendo dinero y viven en un lugar así, sería raro; debe haber una razón espinosa, quizá este Tom Dopan tenga amigos importantes y por eso no pudieron actuar en su contra– Gérard tomo los documentos y los guardo al interior de su gabardina diciendo mordaz –Las huellas digitales en el arma nos darán una pista, quizá evidencia en contra de ese Tom, la declaración de su esposa e hija serán de peso; si tiene heridas nos dará una sentencia y si tiene un cómplice dudo le quiera proteger si hay un trato sobre la mesa– Jean saco su celular –Daré aviso, a la central que notifique a hospitales y clínicas por si reciben a un herido con algo cortante y no tiene una buena explicación–