MI DULCE MAID

MI DULCE MAID CAPITULO 20

//Kasandra llego al Le Grand Paris, una joven castaña vistiendo un uniforme de falda sastre blusa blanca y chaleco le saludo, conversaron ligeramente y se marchó a recorrer varias de las instalaciones de hotel, después de cerciorarse que todo marchaba bien, acudió a la cafetería para almorzar, ocupo una de las mesas y pidió un desayuno americano; la mesera le sirvió con una sonrisa y se retiró, la azabache mientras comía dedicaba tiempo para revisar su table y escribir algún mensaje, de pronto una mujer vistiendo un traje sastre azul marino tenia piel clara, ojos azul claro, y pelo negro recogido en un moño y está rayado de rojo en el lado izquierdo de su frente

–Buenos días señora Bernard– La susodicha le miro amable –Hola Nathalie y ya te dije, solo kasandra– Su contraria negó con la cabeza –Prefiero ser profesional– kasandra se encogió de hombros sonriendo –Debe ser tu descanso, entonces solo somos amigas, anda siéntate y tomemos un café juntas– La peli teñida ocupo el lugar frente a su amiga, le hizo una ligera seña a la mesera y pronto degustaba un fragante capuchino –Dime como van las cosas– Sancoeur le dio un sorbo a la bebida relamiendo la espuma en sus labios –Por ahora todo bien, pero el fin de semana se registró Jagged Stone, por ahora todo está tranquilo– Kasandra se agarró la frente y suspiro –Ese imbécil trajo a su cocodrilo– Nathalie asintió –Tranquila Kasandra, ya le hice registrar todas las habitaciones del tercer piso y los guardias de seguridad extra para las escaleras y elevadores corren por su cuenta y están armados con pistolas tranquilizantes y solo con tarjeta se Vip platino se puede acceder s su piso, su representante se enojó por los costos extra, pero le dije que si no le gustaba podía ir a otro hotel, no dijo nada mas–

//Kasandra feliz se reía, su contraria le acompaño un instante, la azabache sintió que la migraña que comenzaba se disipaba //

–Me alegra que esa niña traviesa interviniera en tu contratación, gracias a ti puedo estar más tranquila, yo no tengo que negociar con abogados porque un gran cocodrilo le arranco un par de dedos a un camarero– Nathalie sonrió con amargura –Ahora que la mencionas, no fue a la escuela– Kasandra achino la mirada y movió la barbilla para que continuara –Solo te lo comento porque la quieres y mi novia me pidió cuidarla, sucedió el viernes, Chloé y Marinette me avisaron cuando yo salía hacia mi casa, al parecer había llegado desde temprano, curiosa le pregunte a Caline me diría que Chloé le aviso que tenía algo especial planeado y que no podían asistir a clases, la reprendió, pero no le hizo caso– Kasandra suspiro cansada –Todo inicio el jueves por la noche cuando Marinette se marchó a su casa, le había ordenado a personal de intendencia que hicieran algunas remodelaciones; ellos inquietos le dijeron al administrador del turno nocturno no querían involucrarse en una tontería y perder su trabajo, y como él; tampoco deseaba involucrarse me llamo a mí, los de intendencia y me contaron lo que Chloé pretendía y como les ofreció un soborno para mantenerlo en secreto, pensé en decirte, pero ya era tarde y no lo considere algo malo, pero para estar segura les dije que tomaran fotos sin que Chloé se diera cuenta y conservaran la propina– Kasandra se mostraba curiosa, la peli teñida lo noto –Quería que se pusieran guirnaldas y cortinas de luces led–

//Nathalie le acerco su table con las fotos que se habían tomada, su amiga las reviso enternecida //

–Así que una cena romántica– Susurro enternecida la azabache, su contraria asintió diciendo –También compro unos vestidos de noche, recién supe que salía apenas se iba Marinette y salía en y visitaba las mejores tiendas de ropa, y también ordeno un pastel en forma de corazón con betún los nombres de Chloé y Marinette– Kasandra enternecida dijo emocionada –Anda cuéntame más– Nathalie torció los labios –No tengo más que ofrecer, no quiero hablar de más, pero creo que ellas pasaron un lindo momento y supongo aun la están pasando bien, son jóvenes– Kasandra carcajeaba –No puedo seguir llamándola niña, no le diré nada y fingiré no saber–