Delenda Este -COMPLETO-

Capítulo 31: Narcissa Entra en una Negociación

A/N: Bueno, gracias a los pequeños enlaces compartidos en la esquina superior derecha, parece que ahora debo incluir notas de autor en cada capítulo o correr el riesgo de que ustedes concluyan que no sé cómo centrar los títulos de los capítulos.

Capítulo 30

Por

Lord Silvere y Gilgameshone

Sirius sonrió frunciendo el ceño tirando de las esquinas de la boca de su amigo más viejo. "Claramente, James tiene la palmadita de 'Bad Auror'", dijo Sirius descaradamente a Albus, "pero ¿no tendría más sentido que Lily fuera la 'Good Auror'? Ella y Bella eran compañeras de cuarto, aunque brevemente."

"Deja de lado el hecho de que en realidad eres un Auror, Sirius", se rió Albus, con los ojos centelleando en la cara agria de James, "Me atrevo a decir que Lady Black esperaría encontrar una colusión entre un par de viejos Merodeadores como tú y James. Así que cumplimos con sus expectativas. Y estaría decepcionada de ti, Sirius, como miembro de la familia Black, si sospechara que carecías de motivos ocultos."

"Donde un muggleborn de ojos abiertos y sin engaño como yo", preguntó Lily con desaprobación, "de alguna manera parecería ser un confidente perfecto para Bellatrix?"

"Después de su rescate de la Mansión Malfoy", le dijo Albus a Lily, volviéndose seria, "le debes una deuda de por vida, lo que puede hacerla sentir que puede permitirse confiar mejor en ti. Además, como eres uno de los dos aritméticos más brillantes que he tenido el placer de enseñar," Albus agregó, los ojos parpadean de nuevo, "Bellatrix puede verte como un recurso útil."

Necesitas una nueva línea, Albus, Lily pensó para sí misma, molesta por la excesiva dependencia de Dumbledore en la adulación de los abuelos, la Bruja Más Brillante de Su Edad ha escuchado eso un millón de veces. "Quizás, profesor", respondió Lily, poniendo los ojos en blanco. "Pero por favor, recuérdame, de nuevo. Estamos planeando una cena o presidiendo un consejo de guerra?"

"Ambos, señora Potter", dijo Dumbledore, dando a su brillante ex alumno una sonrisa de conocimiento, "como usted sabe muy bien."

"Además", agregó Sirius, sonriendo, "en la larga tradición de la Antigua y Noble Casa de las Negras, las comidas familiares siempre han sido más una función de lealtades y traiciones que el filete y las papas asadas."

"Sin embargo, los cuchillos afilados y la carne fresca siempre están en el menú", murmuró James.

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Harry y Bellatrix cruzaron la calle desde 12 Grimmauld Place mientras el sol se sumergía debajo del horizonte, dejando a Londres cubierto de nieve congelarse en el aire de la noche de invierno. Una miríada de hechizos delicadamente lanzados ocultaron a la pareja de la vista mientras vigilaban la casa que había quedado en su mayoría abandonada desde el suicidio de Walburga Black.

"Quién querría tener una cena en ese lugar?" Harry se quejó mientras apretaba los puños y los metió en los bolsillos de su abrigo en un esfuerzo por mantener sus manos calientes. Sus recuerdos de Grimmauld Place de su línea de tiempo nativa todavía predominaban en su mente sobre cualquier otro recuerdo. Había sido un lugar miserable y sucio en el que había pasado demasiado tiempo escondiéndose.

"Recuerdo que asististe a una cena allí", dijo Bellatrix a la ligera, recordándole que la casa había visto buenos momentos — o al menos momentos en que había estado en mejores reparaciones. "Además, creo que los miembros de la Orden mantienen sus casas muy privadas y seguras. Todavía no creo que califique como un amigo de confianza de la familia Potter."