Capitulo 10: Primer round contra el shichibukai

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Wenas wenas queridos lectores... quien diría que ya llegamos al capitulo 10 de esta temp, y el apoyo esta siendo increíble, así que como se los prometí, aquí tienen otro cap, no tengo mas nada que decir, así que disfrútenlo.

Como siempre, 25 estrellistas y cap la proxima semana

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Ya habían pasado unos cuantos días en los que los Mugiwaras y su aliado estaban a la mar rumbo a Dressrosa, en ese periodo de tiempo se enteraron de que Doflamingo había renunciado a su titulo de shichibukai y por ende al reinado de su pueblo, lo que ocasiono que no solo la susodicha isla estuviera enojada por la dimisión de su rey, sino la marina, que habían perdido otro shichibukai, por ende su poder se estaba tambaleando cada vez mas, esto alegro a Law y les aviso a todos que tenían que ir a esa isla a destruir las frutas artificiales llamadas Smiles, estos aceptaron, de igual manera tendrían que pasar por ahí, Kin'emon tomo ese tiempo para explicar todo su viaje buscando Zou, también pasó a explicarles lo temible que era Kaido y que esto iba a ser muy peligroso así que no podían ir a lo loco, Luffy solo lo tranquilizo diciendo que no se preocupara, ellos eran realmente fuertes y estaban preparados para todo, el samurái con cierta duda asintió.

Law informó a doflamingo que su sitio de intercambio iba a ser en green bit, doflamingo aceptó pero en ese momento empiezó a reírse desquiciadamente, para consternación de todos los que estaban escuchándolo.

"sabes mugiwara... tengo algo que te debe interesar bastante!" dijo, en un tono de burla total.

Luffy miró el caracol con ojos serios y oscuros, en la linea de tiempo anterior lo que doflamingo tenia era la fruta de su hermano Ace, pero en esa ocasión el no había muerto, solo habían muerto dos personas importantes para el... su mente rápidamente fue a la peor opción, cuales eran las posibilidades de que doflamingo volviera a tener algo preciado de uno de sus seres queridos "que es?" pregunto, con voz mortalmente seria.

"mmmmhehehehe porque no vienes acá y lo descubres!!" se volvió a reír de manera desquiciada, y sin ceremonias y sin siquiera esperar una respuesta, colgó la llamada.

"eh! Oye!! responde bastardo!!" grito Luffy, con voz enojada y rencorosa y los puños apretados.

Su actitud había estremecido a muchos Mugiwaras, Hancock rápidamente lo trató de calmar.

"relájate Darling, conozco a ese bastardo, estoy segura de que solo te estaba provocando" dijo Hancock, con voz calmada y pacifica dándole caricias en el cabello.

Luffy se logro calmar un poco, era cierto lo que dijo su novia, cuales eran las posibilidades de que Doflamingo obtuviera algo importante de Sabo o Zoro, luego de otro tiempo se relajo lo suficiente para recuperar su actitud.

De fondo todo lo vio Nami ya sin enojo ni furia, solo profunda tristeza, todos sus avances no surtieron efecto y ante sus ojos no veía como pudiera ganar, por como lo veía con Hancock tenían una cercanía envidiosa, además también estaba que la emperatriz lo lograba calmar con las palabras correctas, no como ella que se enojaba o exigía saber los secretos que Luffy todavía no estaba preparado a contar, ahora mismo se estaba dando cuenta de todos sus errores pasados y porque todo termino así para ella, ella nunca pudo hacer nada para levantarle los ánimos, siempre le pedía primero explicaciones y en base a eso actuaba en consecuencia, fueron tantas veces en que el había estado depresivo, reflexivo, roto, y arrepentido, y ella nunca trato de reconfortarlo aunque no supiera su peso, siempre priorizo saber sus secretos y actitud sospechosa, y cuando el estaba mal, lo único que pudo hacer fue dormir en la misma cama con el para calmarlo, eso solo era una solución a medias y corto plazo, ya que no solucionaban el problema ni sus dudas... solo las aplazaba, ahora estaba notando las diferencias... y era doloroso saber que te enteras de esto cuando ya es demasiado tarde, porque ella ya lo sabia y entendió... ¡¡era muy tarde!!, su capitán, eso era lo que solo era ahora, ya no la miraba con amor, ni llego nunca a mirarla con ese amor cariño y alivio en sus ojos como a la pelinegra, eso solo le partió el corazón y le hizo bajar la mirada avergonzada por todas sus acciones... de repente sintió un apretón en su mano que la saco de su autocompasión.

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