M.M | ❝ Oh, my man, i love him so... ❞
En donde Blair Berry finalmente descubre que es estar enamorada.
a glee fanfiction
Sam Evans x Female Oc!
season two - season five
The ❝ Funny Girls ❞ trilogy
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BLAIR Y FINN CUCHICHEABAN ENTRE ELLOS SOBRE LA PELÍCULA que habían visto juntos la noche anterior, antes de que Rachel llegara y se parara frente a ellos.
—Hola... —la menor alzó una ceja hacia su hermana, dejando de hablar en el oído de Finn para mirarla.
— ¿Qué tal?—Saludó la mayor con un muy mal español, mirando a su hermana significativamente para que se mueva y la dejara junto a Finn.
Blair resopló y se levantó de su silla, sentándose lo más lejos posible, para mostrar su desagrado. Finn suspiró, pero de todos modos apretó felizmente la mano de Rachel entre la suya.
Finalmente, el profesor Schuester entró al salón y les pidió a todos los que no estaban sentados que lo hicieran.
—Llega tarde, señor Schue —le reprendió Blair y la mitad del salón la miró con confusión. Habia un aura extraña en Blair ese día. Ella sentía molestía y no entendían porque, ni sus compañeros, ni ella misma.
Aunque aquello se explicó, cuando el director del club volvió a hablar.
—Lo sé, Blair, lo siento. Estaba con Figgins —admitió, sentándose en un banquillo junto al piano —Tengo malas noticias, muchachos. Puckerman está en el reformatorio.
Un gritito ahogado se escuchó por parte de pocos en el salón, la mayoria no estaba sorprendido.
Blair estaba molesta, más bien. Ahora entendiendo porque, le faltaba la presencia de Puck que era igual de bueno para ella que el café que se tomaba todas las mañanas.
—Era cuestión de tiempo. —dijo Tina, todos estuvieron de acuerdo.
— ¿Y ahora qué hizo? —agregó una Quinn muy indignada.
—Estrelló el Volvo de su madre contra el frente de una tienda y huyó con el cajero automatico... —explicó el señor Schue, haciendo que todos estallaran en carcajadas.
—Pero, ¿Cuando va a salir? —intervino Blair, ahora más bien preocupada.
—No lo sabremos. —admitió el mayor en el lugar.
— ¡Él es probablemente el más tonto del planeta, y yo lo digo! —se burló Brittany, ganándose asentimientos de los demás.
Blair la miró con el ceño fruncido.
—No eres tonta, Britt. —le dijo, estirando su mano por sobre Quinn para tomar la de ella.
—No, si lo soy... —agregó la rubia, honestamente. Por su tono, Blair adivinó que eso no le molestaba.
