El juicio contra Suguru Geto por el cargo de haber masacrado la aldea fue el juicio del año probablemente.
Un hechicero y estudiante modelo de pronto se había vuelto contra los principios de la hechicería y cometido un grave delito; atacar no hechiceros sin motivo aparente.
La condena inmediata fue que Geto seria ejecutado.
Sin embargo, Shoko Ieri, Yaga Masamichi, Haibara Yu, Nanami Kento entre muchos hechiceros mas denunciaron ante los peces gordos del mundo de la hechicería la poca importancia que le daban a su bienestar físico y mental.
Aquello término en una huelga, tanto las escuelas de Kioto, Tokio y otros centros de hechicería del país no aceptaron ningún tipo de misión, los profesores no dieron clase y los directores ignoraban las ordenes hasta que los altos mandos no atendieran y resolvieran sus peticiones.
Entre sus peticiones estaba; un seguro de vida para sus familiares en caso de morir, un módulo de atención psicológica para sobrellevar las emociones difíciles a las que un hechicero se ve expuesto y una mejor investigación sobre las clasificaciones de las maldiciones antes de asignar una misión para evitar casos como el de Haibara y Nanami, también exigieron un cambio en el reglamento, en el que los alumnos se vieran en obligación de abandonar una misión que resultase ser mas allá de su rango.
Las protestas causaron que la condena de Geto se aplazara y eso permitió a Satoru mover sus cartas. Lograron revocar la pena de muerte de Suguru cuando un especialista mental conseguido por Shoko, confirmo que el estudiante sufría de depresión y TEPT y que esto lo habían orillado a actuar como hizo. Básicamente Gojo busco echarle mas la culpa al sistema para evitar que Suguru muriera.
Era algo egoísta pero ¿qué mas le quedaba? No podía permitir que mataran a su novio, además todavía estaba el tema de las niñas y de la huelga.
Finalmente, los altos mandos presionados por las protestas de los hechiceros dictaminaron que Suguru Geto no seria ejecutado, pero que estaría bajo arresto domiciliario hasta cerciorarse que ya no era una amenaza.
Suguru Geto tenía prohibido abandonar Tokio, y de ser posible la escuela de hechicería. Si desobedecia el dictamen seria ejecutado inmediatamente.
Así pues, casi una dos semanas después de haber sido encarcelado, Geto fue sacado de las celdas y le leyeron su sentencia, la cual acepto. Podía permitirse no salir de Tokyo mientras pudiera seguir con vida para asegurarse que las dos pequeñas que salvo estuvieran bien. Tal parece que no iría a casa en algunos años.
Sin embargo, lo único en su mente era Satoru y las niñas.En aquellos días durante su encierro solo pensaba preocupado en las pequeñas que había traído consigo, ¿las estarían tratando bien?, y ¿qué hay de Satoru? ¿Estaría molesto con él?
Después de ponerse ropa limpia le dejaron salir al pasillo de las celdas. Poco después escucho las pisadas características de Satoru, levanto la mirada para ver a su novio luego de tanto tiempo sin verle.
Sentía que habían pasado años.
- Satoru-
Satoru por su parte corrió a abrazarle y aspirar el profundo aroma de aquel hombre, lo había extrañado. Había estado muerto de miedo de no lograr salvarlo, de no convencer a los peces gordos de revocar la pena de muerte de Suguru.
Casi no había dormido aquellos días, hablando con quien pudiese para poder sacar a Suguru de ahí.
- Suguru, ¿sabes que la burocracia es lentísima? Otro poco más y no te habría logrado salvar- se quejo el albino negándose a soltar a su pareja.
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Emerger De Las Profundidades
FanfictionSatoru Gojo toma la tarea de ayudar a Geto a salir de la profunda depresión que la muerte de Riko le ha causado, en el proceso descubrirán los sentimientos que ambos guardan por el otro pero ¿es el amor suficiente para enfrentar las pruebas que tend...