billionaire playboy (Libro 3 )

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Capítulo Uno

Zhan

-¡Infierno sangriento! -Me quedé mirando el café caliente que se extendía rápidamente por mi traje.

Estaba empapando mi
camisa y la parte delantera de mis pantalones, haciendo que
pareciera que me había orinado. Y era café caliente.
No era así como planeaba comenzar mi día.

-Oh, señor, lo siento mucho. Es totalmente mi culpa. No lo vi.

Apreté la parte superior de la cabeza de alguien mientras
palmeaban mi ropa, tratando de absorber el café con una
servilleta. Conocía a la mayoría de las personas que trabajaban
para Cucharas de Plata Inc., pero no recordaba a nadie que tuviera el
pelo castaño oscuro así.

Estoy bastante seguro de que lo habría recordado.

-Lo siento mucho, señor Xiao.

-Está bien, -me encontré diciendo, lo que iba bastante en
contra de mi naturaleza. No pensé que fuera completamente
grosero con la gente, pero me habían dicho que era algo enérgico.

Simplemente no podía soportar la incompetencia, y siendo el
Director de Riesgos de Cucharas de Plata Inc., me encontré con ella
muchas veces. Estaba en la descripción del trabajo. Era mi
responsabilidad intervenir cuando había problemas con nuestras
adquisiciones y encontrar soluciones para que esos problemas desaparecieran. Podría ser bastante creativo cuando la necesidad lo requiriera.
No estoy seguro de que eso fuera lo que se pidió en este
momento.

-Está bien, -dije de nuevo.

-Realmente lo siento, señor -La cabeza del hombre se levantó
hasta que pude ver su rostro.

Contuve el aliento.
Ojos tan hermosamente oscuros me miraban a través de unas gafas de montura gruesa que descansaban sobre una nariz recta. Tenía la barbilla afilada y la boca ancha con labios un poco demasiado llenos. Tenues mechones de cabello caían sobre su frente.

Mi mirada estaba clavada en su rostro y luego se movió
lentamente sobre su cuerpo. Hice una breve pausa cuando vi el corbatin a cuadros rojo y azul antes de pasar por encima de su
camisa de vestir blanca y su chaqueta de traje azul oscuro. Miré
sus impecables pantalones azul oscuro hasta sus zapatos de vestir
negros.

Y luego volví al corbatin.

Sentí un cosquilleo en la boca del estómago.
Mis ojos se entrecerraron con sospecha.

-¿Quién eres tú?

La boca del hombre se curvó en una atractiva sonrisa.

-Mi nombre es Yibo, señor. Wang Yibo. Soy el asistente ejecutivo del señor Ji Chong.

-¿Qué le pasó a Nina?

No me había ido tanto tiempo.

-No estoy al tanto de esa información, señor, pero puedo
preguntarle al señor Ji.

-No, le preguntaré. -Caminé por el pasillo hacia la puerta de Chong.

-Señor, señor, el señor Ji no está en su oficina.

Me detuve antes de llegar a la puerta de Chong y me volví para
mirar al hombre.

-¿Dónde está?

-Todavía no ha llegado a la oficina.

Mis cejas se arquearon con sorpresa.
-¿Chong aún no está en la oficina?

Siempre estaba en la oficina. Los únicos que solían llegar a la
oficina antes que él eran Wangji y Wuxian. Me alegré de que mis horas de trabajo reales fueran tan fluidas. Por supuesto, dediqué tantas horas como ellos, pero casi todas eran fuera de la oficina y en
diferentes zonas horarias.