En la década de 1930, el mundo estaba sumido en una tensión palpable que culminaría en uno de los conflictos más devastadores de la historia: la Segunda Guerra Mundial. Iniciada en 1939, la guerra involucró a naciones de todo el globo, dividiendo al mundo en dos bloques principales: las Potencias Aliadas y las Potencias del Eje.
El conflicto se extendió por el teatro europeo, africano y del Pacífico, dando lugar a batallas épicas como la Batalla de Stalingrado, el Desembarco de Normandía y la Batalla del Pacífico. El Holocausto, una atrocidad sin precedentes, vio la persecución y exterminio sistemático de millones de judíos y otras minorías por parte del régimen nazi.
En la madrugada del 6 de junio de 1944, el Desembarco de Normandía, conocido como el Día D, marcó un momento decisivo en la Segunda Guerra Mundial. Las fuerzas aliadas llevaron a cabo un asalto masivo en las playas de Normandía, con el objetivo de liberar Europa occidental del control nazi.
El Día D representa un acto de valentía y sacrificio, simbolizando la determinación de las naciones aliadas contra la opresión nazi y allanando el camino para la liberación de Europa.
Se escucha un crujido de una puerta.
"Esto es lo que hago, y pensar que quería ayudar a ellos", dice en su mente con un pensamiento negativo. Su silueta es la de un hombre joven, fornido y con el pelo corto.
"Y ahora, ¿dónde me encuentro? Este lugar es muy relajante, pero está vacío". Se asoma a una ventana y nota que está en una cabaña en un valle. Lo único que ve es niebla a lo lejos y montañas altas.
"Esto es el cielo, esto es el Edén del que me habló el sacerdote. No es cierto, esto no es igual a lo que él me contó". Lo piensa mientras golpea un muro de la cabaña frustrado.
"Tengo que salir". Abre la puerta, alcanza a ver algo en el ártico y es un hombre sentado en una mecedora.
Él es el abuelo. Salen lágrimas lentamente y le llega un recuerdo de un pasado lejano.
En ese recuerdo pudo visualizarse una fiesta de cumpleaños en la que hay gente divirtiéndose y niños jugando, mientras un niño de pelo corto y flaco está con su abuelo en el patio.
"Alex, hijo, ¿por qué no te diviertes con tus primos?", dice el abuelo mientras está reparando una silla que está rota de una de sus patas y recostadero.
"No, abuelo, a mí me interesa la carpintería y los muebles que usted hace", dice el niño llamado Alex.
El abuelo sonríe y dice con voz de preocupación: "Alex, deberías jugar. Yo a tu edad corría y saltaba de un lado para otro con mis hermanos, así me divertía. Tú también deberías disfrutar de que tu primo Rayan haya cumplido años y le hayan hecho una fiesta."
Con una mirada fascinada, Alex observa el trabajo de su abuelo reparando una silla. "Wow, está como nueva abuelo. No te preocupes, me gusta verte reparar los muebles y crear otros."
Alguien se acerca, el abuelo ve que es la hermana de Alex. "Alex, ¿qué haces aquí? Vamos a jugar a las escondidas." Dice la hermana de Alex, mientras observa curiosa lo que hace el abuelo con la silla.
Alex se levanta y le dice: "Keith, espera. Quiero ver al abuelo trabajar."
El abuelo se levanta, mientras observa lo que más le falta por hacer. "No te preocupes, hijo. Mejor vamos por hoy, es suficiente. Mañana puedo seguir."
Keith sonríe mientras invita a Alex a jugar. Termina el recuerdo.
Alex sale de la cabaña y pregunta: "¿Abuelo, eres tú?"
Mientras llora Alex, el abuelo voltea a verlo y dice: "Alex hijo mío."
Responde Alex con una voz solloza: "Sí abuelo, soy yo, Alex tu nieto."

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EN LA GUERRA TAMBIÉN HAY SERES HUMANOS
Avventura(Cada persona tenemos una batalla interna pero vivir y combatir con ella en una batalla real es más difícil de lo que crees). La historia sigue a Alex, un joven soldado, quien se encuentra en un misterioso lugar después de abrir una puerta en medio...