01. El pueblo encantado

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Apenas voy sintiendo que recupero la conciencia cuando siento un dolor punzante en la cien. Dios mío, ¿Por qué estoy recostado? Hace un momento estaba tomando fotos, que mierda...

Duele, duele mucho.

Intenté abrir los ojos, y, tras fallar terminé revolcándome en el lugar en el que estaba, llevando ambas manos a mi cabeza y ejerciendo presión en ella. El dolor permanece y empiezo a desesperarme.

- ¡Ey, ey, ey!

Era la voz de un chico, que inmediatamente después de decir eso, agarró mi cara, creo que también se arrodilló. No entiendo su intención pero tampoco estoy en mis cinco sentidos como para pensarlo.

- ¡Tía Julieta! ¡El chico! ¡Arepa! ¡¿Jugo?! ¡Algo!

Su nerviosismo me hubiera causado gracia en otro contexto, aunque me pareció sentir que sus manos cambiaban de forma mientras hablaba... debo estar alucinando. Sentí el dolor disminuir, al menos lo necesario para limitarme a agarrarme la cabeza y ahogar mis posibles gritos.

Antes de darme cuenta tenía más de tres personas sentadas alrededor mío, quienes me sostuvieron la cabeza mientras me metían un pedazo de arepa en la boca. Mi primer impulso fue querer escupirla, pero escuché una voz conocida.

- ¡____, Traga, mierda!

Mi hermana, dudo que ella esté de acuerdo con matarme junto a un grupo de desconocidos, así que simplemente empecé a masticar para comer ese pedazo de arepa. Mientras lo hacía, las personas a mi alrededor permanecen tensas, sin embargo, ese chico del inicio sigue sosteniendo mi cara. ¿Por qué lo hace?.

Lo miré a los ojos un momento, su piel y su pelo son muy bonitos, no se si quiero tocarlos, tomarles muchas fotos o dibujarlos. Al parecer, le sorprendió que lo mirara directamente, porque me soltó de inmediato.

Oh, ya me siento mejor... pero creo que me voy a desmayar.

Mi hermana me explicó lo sucedido, al parecer, ambos caímos desde lo más alto de las montañas que rodean este pueblo a una zona de cultivos, milagrosamente, no morimos y un ciudadano nos vio, lo único que faltaba era que este fuese un mundo mágico...

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Mi hermana me explicó lo sucedido, al parecer, ambos caímos desde lo más alto de las montañas que rodean este pueblo a una zona de cultivos, milagrosamente, no morimos y un ciudadano nos vio, lo único que faltaba era que este fuese un mundo mágico de fantasía. No es gracioso, ¿y si es un culto o algo así de extraño?.

- Okay, dejando lo secundario para después, ¿Están bien mi walkman y mi cámara?

- ... No puede ser que eso sea lo primero que me preguntes después de lo que acaba de pasar.

- ... Entonces, ¿si están bien?

- ¡Si! Están bien

Suspiré con alivio. Recorrí con la vista la habitación en la que estábamos, las paredes eran verdes y tenían papeles pegados a ellas, habían repisas con plantas, una cama cubierta por ligeras sabanas de colores cálidos, en la que estamos sentados, y un escritorio con tela y una maquina de coser. Todo iluminado por una ventana algo grande que se encuentra a nuestra izquierda. Hasta podría decir que alguien vive aquí, y sería normal, si no fuese porque la otra mitad de la habitación esta llena de cajas, aún no descifro si está abandonada o está a punto de estarlo.

Captura el momento - Camilo Madrigal x Male readerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora