XIII

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Las horas pasaron tan rápido que de un momento a otro, el grupo ya se encontraba en su hotel, listos para descansar después de estar caminando por un buen rato

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Las horas pasaron tan rápido que de un momento a otro, el grupo ya se encontraba en su hotel, listos para descansar después de estar caminando por un buen rato.

Un chico pelinegro, se encontraba caminando por los pasillos del hotel en dirección a la habitación de su mejor amigo. Este chico tenía a su mascota en mano y un par de botanas en la otra, pues tenía planeado hacer una pijamada con su amigo, hace tiempo no tenían una, y, sería bueno regresar a esos tiempos ¿No lo creen?
No tardó mucho en llegar, solo unos pocos minutos y ya estaba tocando la puerta, con entusiasmo y alegría.

Por otro lado, en aquella habitación, se encontraba el susodicho, quién estaba tumbado en su cama, su habitación estaba hecha un desastre, al igual que su aspecto, desde la mañana le dio pereza arreglar su habitación, y cuando llegaron del centro comercial estaba dispuesto a dormir hasta el día siguiente. Sin embargo, al oír los golpes en la puerta se alarmó un poco, ¿Quién será? —Pensó mientras se levantaba de la cama, con prisa, y se arregló el cabello. Se acercó a la puerta, abrió con una sonrisa, la cual se borró de inmediato al ver a Phantom parado ahí.

— Hol- Ah, eres tú. —Rodó los ojos al ver a su visita.

—Hola, Sodo, también me da gusto verte. —Sus palabras estaban cargadas de ironía.

—Ve al grano, ¿Qué quieres? —Gruñó con molestia, ya que la paciencia se le estaba agotando.

—¿Qué? Te dije que íbamos a tener una pijamada, te mandé como mil mensajes. —Fingió estar sorprendido porque su amigo no vio sus mensajes, era algo completamente esperado de Sodo, pero Phantom siempre lo atacaba con su ironía y sarcasmo.

—¿Mensajes? Yo no recibí nada. —Contraataca las palabras de Phantom, fingiendo que no sabe nada (Si los vio, pero silencio su teléfono para seguir durmiendo)

—¡Me dejaste en visto, Sodo Erickson!

—Estaba cansado ¿Si? Cómo sea, pasa.

Phantom se le quedaba viendo con una mirada que decía «uno de estos días voy a matarte» obviamente a modo de juego, ante esto, Sodo solo le sacó la lengua, como un gesto que decía «intentalo si puedes»  y finalmente, Phantom hizo un gesto de indignación para después, echarse a reír junto a Sodo; al final de todo, son amigos y se soportan mutuamente desde hace más de dos años.

Cuando Sodo cerró la puerta se dio cuenta que Phantom tenía a su cachorro descansando en sus piernas.

—¿Que? ¡¿Que hace el aquí?!— Señaló al cachorro, con una evidente molestía.

—Dejalo, no te enojes porque lo quiero más a el que a ti—Rie con gracia, mirando al contrario. —Vamos Sodo, no te enojes, también te quiero.

—¿Eh? ¿Que dijiste? ¡Repite eso de nuevo!— Mirá a su amigo abriendo los ojos de manera exagerada y con su boca formando una «O»

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⏰ Última actualización: Mar 23 ⏰

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¿𝐄𝐬 𝒂𝒎𝒐𝒓 𝐨 𝒑𝒍𝒂𝒄𝒆𝒓? (𝘚𝘸𝘪𝘴𝘴 𝘹 𝘚𝘰𝘥𝘰 𝘖𝘮𝘦𝘨𝘢𝘷𝘦𝘳𝘴𝘦)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora