𝑶𝑩𝑺𝑬𝑺𝑰𝑶𝑵 - 05

172 25 2
                                    

Estuve en medio de un incómodo silencio... Hasta que empezó una pelea entre ellos, me sentía el mal tercio en esta situación. Estábamos en la habitación para ver la película juntos... pero Colombia y el señor URSS discutían sin parar, bueno... Solo mi hermano parecía que quería discutir con él, porque Unión solo lo miraba en silencio mientras sonreía de una forma... Bastante Interesante, yo creo que aquí hay algo más que una amistad por más que mi hermano lo niegue, tengo el presentimiento de eso.

Colombia nunca antes había desarrollado sentimientos por alguien más, mis hermanos nos preguntábamos que orientación sexual tenía... Como él nunca mostraba síntomas de enamoramiento y nunca nos hablaba si le atraía alguien, tomamos como conclusión que era asexual.

-¡Cómo se le ocurre ser tan insistente con eso! Si a mí se me da la gana de contestar las hijueputas llamadas, las contesto y si no, no. Así de sencillo ¡no tengo por qué aguantarme sus malparidos reclamos!

El soviético de golpe se coloco de pie, mi hermano lo miró con algo de susto, yo boqui abierto miré como él se le estaba acercando a su rostro, la papa que ni tiempo pude de masticar se callo de mi boca.

-Estas siendo un poco molesto.

Algo impactado miré atentamente esa escena tan... Inesperada para mí, Colombia lo miraba fijamente y eso me hizo darme cuenta que de alguna manera estos manes tienen mucha confianza de lo que yo pensaba.

Colombia no demuestra esa confianza con todo el mundo; aunque este muy enojado, siempre es cordial y más con sus socios.

-Me importa un comino-

Sin previo aviso, el soviético agarro con una sola mano la barbilla de mi hermano, en ese momento... No sabía dónde enterrarme, empecé a toser a propósito... Pero termine tosiendo de verdad y ya no me podia detener, los dos me miraron con confusión.

Al detenerme me quedé en silencio, Colombia empujó hacia atrás a don unión, el soviético me miró y derrepente se acercó a mi agarrando de mi brazo, me jalo y me llevo hasta la salida de la habitación, al literalmente echarme me observó con frialdad.

-¿Te importa si nos dejas solos está noche?

con miedo negué con la cabeza y di dos pasos atrás, decidí dejarlos solos... Me fuí solito ¡Que grosero! ... Tal vez llame a Perú... No, mejor no... ¿O si? Na' a colo no le molestará.

Narrador omnisciente.

La puerta se serró de nuevo, el de piel rojiza como la mismísima sangre se volteo a mirar a el tricolor, a paso calmado se estuvo acercando, aquellos amantes no perdía el tiempo si se trata de sus peleas. Colombia, aún de pie y dónde estaba, trató de alejarse de la consecuencia de haber acabado con la paciencia del europeo.

El sudamericano, presentía que en algún momento esa paciencia de unión se acabaría. Pero no pensó que fuera en ese momento.

-¿No te importa? Mmm, creo que te tendrá que importar desde ahora-el tono de su voz sonaba más serio que de costumbre-Sabes lo que haces, no eres ningún angelito y lo sabes, Colombia... Y yo también lo sé.

Con firmeza agarro de los brazos a el más bajo y con brusquedad lo choco contra la madera de la puerta del baño causando un estruendo por toda la habitación.

-Maldito masoquista. Eres bien perverso y eso algunas veces me facina... Pero, está vez... Está vez si te pasaste.

Colombia lo miraba fijamente, tenía a un enorme oso enojado al frente de él, definitivamente es una mala opción actuar terco en ese momento. Sabía dónde y cuando tenía que limitarse a prenderlo de ira y al parecer, está vez si se pasó de la raya.

OBSESIÓN -🇨🇴 ☭Donde viven las historias. Descúbrelo ahora