𝐀 | Termino psicológico para definir el fenómeno que surge cuando ves a una persona y se le imagina sin ropa. Desnudar con la mente.
⚜ | El tamaño del ego de una persona, se puede medir en la forma que maneja los errores cometidos por los demás.
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¡ જ ! ❞
𝑨𝑷𝑶𝑫𝒀𝑶𝑷𝑺𝑰𝑺
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ఌ︎ | Omnisciente
𝐄𝐋𝐀𝐌𝐁𝐈𝐄𝐍𝐓𝐄𝐏𝐄𝐒𝐀𝐃𝐎dentro de la habitación se podía sentir hasta para las personas que se encontraban un poco alejadas de la oficina de la CEO de Casslo Beauty. Los gritos que eran amortiguados por las paredes del inmenso cuarto no eran suficiente para ocultar el brote de tristeza que sentía Gavi en esos momentos, y Casandra tampoco se quedaba atrás.
Justo en esos momentos estaban viviendo una de las muy frecuentes peleas de pareja que habían estado teniendo en los últimos días. Los gritos, que llevaban minutos sin detenerse, se calmaron por unos cuántos segundos, segundos en los que Casandra y Gavi no hacían más que mirarse el uno al otro con respiraciones agitadas de tanta gritería. El cansancio después de arduas noches de trabajo comenzaba a notarse bajo los ojos de Cassie, que era quién más reacia a pelear se mostraba.
—Terminaremos de hablar esto en casa, Pablo.
El sevillano arrugó la cara con disgusto por séptima vez en la noche, suspirando profundamente. —¿En qué momento planeas hablarlo, Casandra? Viajo mañana a primera hora y son casi las diez de la noche.
—Ya sacaré tiempo, amor, no te...
—¡¿Tiempo de dónde, joder?! —se desesperó. —¡Llevas más de una semana desaparecida todos los días! Casi ni te veo por casa, Casandra.
Los gritos totalmente fuera de lugar hicieron que los sentidos de Cassie se activaran al instante. Llevaba más de veinte minutos aguantando la histeria de su pareja, y estaba comenzando a cansarse.
—Pablo, baja la voz.
—¡No me digas que baje la... !
—¡Qué bajes la voz de una puta vez, Gavi! ¡Cierra la boca! —gritó, golpeando su mano bañada en anillos y accesorios contra la madera fina de su escritorio. El estruendo se escuchó como un eco que recorrió la oficina, y, sin poder evitarlo, Gavi dio un paso atrás con un gesto pálido, sabiendo que, una vez más, estaba sacando a la mujer de sus casillas.
