Capítulo 18

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No solo las personas cercanas, sino también las personas frente al auditorio volvieron la cabeza.

Cuando Le Han escuchó la voz en su oído, todo su rostro estaba caliente y su respiración era un poco superficial.

En lugar de mirar hacia arriba, asintió levemente y dijo: "Gracias".

El hombre que lo sujetaba no dijo nada y lo soltó. Inmediatamente, He Yiming se acercó y quiso reemplazar a Le Han, "Le Han, ¿estás bien?"

Le Han lo evitó, escondiéndose reflexivamente detrás del hombre que acababa de apoyarlo.

He Yiming gritó en voz baja: "¡Le Han!"

El hombre que estaba frente a Le Han sostuvo a He Yiming con una mano y dijo débilmente: "¿Quieres que te sigan vigilando? Si quieres causar problemas, sal primero".

La expresión de He Yiming se condensó y levantó la cabeza para mirar al hombre.

Las luces brillantes del pequeño teatro pasaron como un relámpago y las pupilas de He Yiming se encogieron.

En la vida real, He Yiming rara vez conocía a un hombre que pudiera igualarlo de manera equitativa.

Nunca se comparó con los demás porque tenía una gran confianza en sí mismo. Desde la apariencia hasta el conocimiento e incluso los antecedentes familiares, pocas personas eran mejores que él en todo.

Sin embargo, simplemente mirar el rostro del hombre frente a él lo hacía sentir incómodo.

El hombre era más alto que él y su apariencia era aún más hermosa. Con solo estar allí, el hombre emitía una fuerte sensación de presencia.

Se paró frente a Le Han, actuando como su escudo protector. El hombre lo miró con desprecio, lo que provocó que el corazón de He Yiming estallara de ira por primera vez.

Yu Manman estaba llorando, apoyada en los brazos de su amiga y todavía regañando todo con un lenguaje feo y soez.

"Está bien, está bien, ¡salgamos primero!" El otro amigo de Qiao Rui sintió que se le entumecía el cuero cabelludo y dijo rápidamente.

El grupo salió del pequeño teatro y caminó un largo camino, hasta llegar finalmente a un lugar con menos gente.

Yu Manman lloró hasta quedarse sin aliento, pero aun así los siguió de alguna manera. Su amiga la consoló en voz alta: "Está bien, ¿por qué lloras? ¿Por el bien de esos dos hombres perro?

Qiao Rui también fue extremadamente descortés y le dijo fríamente a la mujer: "Lávate la boca. ¿Quién crees que eres? ¿Sabes siquiera lo que tu amigo le hizo a Le Han en la escuela secundaria?

Tanto Yu Manman como su amiga se quedaron paralizados.

Aunque la niña no asistió a la escuela secundaria de Le Han, conocía a Yu Manman desde hacía mucho tiempo. Naturalmente, había oído a Yu Manman hablar sobre la escuela secundaria.

Es solo que cuando Yu Manman hablaba de cosas en ese momento, parecía ridícula y orgullosa, y las escuchaba como si escuchara bromas y chismes.

En ese momento, Yu Manman insistió: "¿Qué puedes hacer?"

Qiao Rui se enfureció por la desvergüenza de Yu Manman y dijo directamente: "No crean que no golpeo a las mujeres".

El rostro de Yu Manman cambió. "Tú-"

"Ai, Qiao Rui, ¡tú también cálmate!" Otro hombre se apresuró a persuadir.

He Yiming miró a Qiao Rui, luego a Yu Maman y frunció el ceño. Siempre sintió que algo andaba mal. Debe haber algo que no había notado antes, pero lo que más le preocupaba en ese momento era Le Han, por lo que temporalmente reprimió sus dudas.

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