My Secret Love

Capitulo 2 ( ALEX )

Me despierto por un tremendo dolor de cabeza, es como si me la aplastaran con martillos. Abro los ojos y espero mientras que mis ojos se acostumbran a la poca luz que hay en la habitación. Trato de moverme pero siento una punzada de dolor en mi abdomen, veo que tengo unas vendas que recorren de mi hombro izquierdo hasta mi parte derecha del abdomen. Veo que en mi mano tengo una aguja puesta por donde pasa el suero y la sangre.

Una vez mis ojos ya acostumbrados, me fijo que no estoy en un lugar conocido, volteo a ver por todos lados de la habitación buscando algo conocido, las paredes son de un color crema , tienen cuadros de flores en estas, una puerta de madera a la derecha que esta a unos pocos metros de mi, lo mas seguro es que sea un baño, un televisor en la parte alta de la pared de enfrente de mi cama y un sillón de color verde en la parte izquierda de la habitación debajo de la ventana.

En el sillón puedo ver una figura recostada en el, así que trato de levantarme a la ves  que me quito el suero, para ver que es, mejor dicho quien es. Es una chica de tez morena (dorada), su melena la lleva suelta, es de color café castaño lacio, lleva unos jeans ajustados, unos tenis y una blusa pegada de manga de tres cuartos de color azul cielo. Se mueve un poco y la puedo ver mejor por la luz que entra detrás de las persianas, le miro la cara, me quedo atónito, sus facciones son muy finas, su nariz es respingada, sus pestañas son largas, sus labios son delgados y pequeños de un color rosa intenso, no puedo dejar de mirarla, es muy hermosa. Noto que tiembla y salgo de mi trance, me apresuro a tomar una cobija de la cama y la cubro con esta, ella al sentir la cobija la toma involuntariamente sin despertarse. Veo que deja de temblar y algo dentro de mi se clama.

Me muevo por la habitación sin hacer ningún ruido, para no despertarla. Una ves ya enfrente de la puerta del baño, o eso creo, la abro y entreno en el, busco con la mirada el interruptor de la luz, una ves que lo veo lo presionó y veo el baño, es pequeño, pero lujoso, enfrente de la puerta esta el inodoro, a su lado derecho esta una regadera con una tina y a su lado izquierdo esta un lavamanos y una espejo. Me acerco este y abro la llave, dejo que caiga el agua, junto mis manos para que se acumule el agua y luego me mojo la cara con el agua fría, tomo una toalla que se encuentra al lado del lavabo y me seco la cara. Me veo en el espejo por si tengo alguna otra herida pero no hay nada, solo unos pequeños raspones en mi espalda.

Salgo del baño y veo el reloj que marca las 4:30 am, me irrito un poco, porque no podré conciliar el sueño. Me vuelvo a acostar en la cama, pero me volteo viendo a la chica que esta a unos metros de mi, no puedo dejar de mirarla, todo de ella es hermoso.

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Unas horas después salgo de la habitación para ver en donde estoy. Cuando salgo de esta, noto que hay mas puertas como la mía por todo el pasillo , pero con diferentes números, leo en la puerta por la cual he salido que dice 513 en una pequeña placa dorada, unas puertas tienen algunas ventanas a lado de ellas y otras solo es pared. Camino sin rumbo, hasta el final del pasillo, veo que hay una pequeña recepción, es un pequeño mueble color marron, en el hay varias enfermeras sentadas riendo de algo que comento una de las enfermeras. Todas llevan el mismo uniforme blanco en forma de vestido, que les llega hasta las rodillas, también llevan unas medias blancas y unos zapatos igual blancos, unas enfermeras llevan el cabello en un moño o en una coleta de caballo.

Me acerco a ellas, pero ellas no se dan cuenta de mi presencia ya que siguen riéndose, carraspeo un poco para que puedan notarme. Al escuchar mi carraspeo, se ponen pálidas, como si hubiesen visto algo del otro mundo. Todas me miran asustadas, se relajan al darse cuenta que no era la persona que ellas pensaba que era. Una de ellas decide ser quien acabe con el silencio que se ha creado.

- ¿En que puedo servirle?-  me pregunta amablemente, es delgada, a decir verdad puedo apreciar su buena figura debajo de aquel horrendo uniforme. Es alta, pero mas bajita que yo, su piel es blanca, su cabello es color marrón. La enfermera solo me mira de pies a cabeza, se sonroja cuando su mirada se posa en mi cuerpo.
- Eh- trato de recordar por qué he venido hasta aquí.- A si!- digo eso mas para mi, que para ellas- ¿Me podría decir en donde estoy? ¿ Y cómo llegué aquí?
Ella solo asiente y se voltea para buscar algo, después de unos minutos de espera, pone una enorme carpeta en la mesa y la abre.
- Esta en el Hospital Clínico Leninskij ¿Podría decirme su nombre? O ¿ En qué habitación se encuentra?- trato de recordar el numero de la habitación.
- ¿513?- la enfermera me ve confundida ya que no me ha escuchado bien, recuerdo que ese es el numero- 513- digo con firmeza. Ella busca en el carpeta.
- Usted llego aquí, a las 11:30 pm, gracias a una chica que lo salvo, lo han operado para quitarle la bala que estaba adentro de su cuerpo - me mira el torso desnudo y se sonroja- El doctor Harrison ha sido quien lo ha operado. El pasara mañana en la mañana, bueno en unas horas para ver como se encuentra.
- Gracias- le digo cortés mente, ella solo se sonroja y se encoge de hombros. Una pregunta viene a mi mente- ¿De casualidad sabe que ha pasado antes de que me trajeran aquí?- ella voltea a leer los documentos, cuando termina niega la cabeza y dice.
- No, lo siento- se encoge de hombros. Asiento, de manera de agradecimiento y me regreso a la habitación. Abro la puerta con cuidado para no hacer ruido, veo el reloj que marca las 6:39 de la mañana. Me recuesto en la cama, me giro como antes estaba para seguir viendo a la hermosa persona que esta enfrente de mi.