- Donde Sunghoon y Yeorin son amigos de la infancia y forzosamente deben separarse, sin saber que años después se reencontrarían teniendo que aprender como sobrellevar los obstáculos del futuro y el pasado.
Iniciada V-II-XXIV
Terminada ??-??-??
Proh...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
El momento que Yeorin y Sunghoon se conocieron fue algo que no sabían lo mucho necesitaban
En un tranquilo día de otoño, el bullicio de la escuela primaria llenaba los pasillos con risas y voces animadas. Entre la multitud de estudiantes se encontraba un niño tímido con cabello oscuro y su mirada esquiva.
Mientras buscaba su salón de clases, una presencia vibrante lo sacó de sus pensamientos. Levantó la mirada encontrándose con Yeorin, una niña de no más de 8 años, con ojos chispeantes acompañandola junto una sonrisa radiante y una una energía contagiosa
— ¿Hola? ¿Eres nuevo aquí? — preguntó Yeorin acercándose a Sunghoon como si lo conociera de toda su vida
Sunghoon, algo sorprendido asintió nerviosamente — Sí, acabo de mudarme a la ciudad. Soy Park Sunghoon —
— ¡Yo soy Cha Yeorin! Bienvenido a nuestra escuela — respondió Yeorin alegremente — Déjame acompañarte a tu aula — Yeorin sonrió al ver que Sunghoon volvía a asentir
Yeorin acompañó a Sunghoon a su aula mientras le mostraba los alrededores de la escuela, Sunghoon solamente escuchaba a la contraria hablar, le sorprendía un poco como una persona tomaba tanta confianza rápidamente.
Después de un rato de caminar, Sunghoon paró su caminar — Es aquí, muchas gracias por acompañarme pero ya te puedes ir — sin embargo no obtuvo la respuesta que esperaba de Yeorin
— Que coincidencia, parece que seremos compañeros — y la sonrisa característica de Yeorin volvió aparecer, sin embargo no obtuvo la misma reacción de parte de Sunghoon.
Durante el receso, Yeorin invitó a Sunghoon a jugar en el patio, Sunghoon hizo una ligera mueca al ver a Yeorin saltar y reír con tanto entusiasmo. Al pasar el rato, Yeorin notó la mirada tímida de Sunghoon así que se acercó a dirección al pelinegro
— ¿No quieres jugar, Sunghoon? — preguntó Yeorin al notar la falta de entusiasmo del contrario — Es tu primer día, ¿Por qué no intentas hacer amigos? —
Sunghoon titubeó mirando al suelo antes de responder — No... es solo que no acostumbro a hacer actividades como esas —
En ese momento, la sonrisa energética de Yeorin cambió a otra avergonzada y solamente asintió comprensivamente, Sunghoon no pudo evitar sentirse culpable. Y a pesar de que Yeorin se sentía triste de no poder mostrar su amor por los juegos a su "nuevo amigo", decidió adaptarse a él, sin embargo sin rendirse a buscar maneras de como conectar con él.
Después de clases todos se estaban retirando a sus casas. Yeorin se encontraba esperando que su madre pasara a recogerla, sin embargo, no pudo evitar fijarse en aquel niño de cabello negro que seguía con aquella mirada tímida.
Dudosa, se acercó nuevamente al pelinegro — ¡Hola Sunghoon! ¿Qué tal si vamos al parque antes de ir a casa? — Sugirió Yeorin sonriendo con esperanza — Podemos caminar juntos y simplemente hablar —
Sunghoon vaciló, sintiéndose dudoso con la idea de más interacciones extrovertidas — No estoy seguro Yeorin, tengo que llegar a casa a ayudar con unas cosas —
Y de nuevo la sonrisa de Yeorin se desvaneció — Oh, está bien... — contestó desanimada — Otro día será — Sunghoon solamente suspiró como respuesta — ¡Igual espero verte mañana! — y sin decir algo más se dió la vuelta
Mientras se despedían en la puerta de la escuela, Sunghoon sintió una punzada de conmoción por los intentos de Yeorin, sintiéndose incluso agradecido.
