Valentina Felter es una joven que pertenece a la alta sociedad, es una reconocida actriz que tiene el mundo por delante.
Enzo Vogrincic salta al nuevo mundo de la fama tras grabar La Sociedad de la Nieve, conociendo junto a sus amigos caras icónicas...
— ¡Y la besó enfrente mío! Yo te juro que casi salto a matarlo una bronca me dio - se desahoga la rubia con Kit en la cocina de su casa sentada en canastita en una mesada.
— Aparte te empezó a seguir, cualquiera está haciendo - dijo con la boca llena de torta su mejor amigo
— Hace mucho tiempo no hablábamos no sé- se quedaron un minuto en silencio, no sabía que más podía decirle - Pero bueno ya está.
— ¿Qué tal con Ross? - pregunta Kit - Vi ayer una foto de ustedes en redes. Igual que la noche anterior y la anterior también.
— Ah sí, nos vieron salir de bares. Es muy coqueto, me cae bien el ex-chico Disney. Tiene muchas historias para contar - responde Valentina mientras se pone un poco nerviosa.
Había estado saliendo con el chico desde la noche en que se conocieron, ambos se divertían hablando de fallos en grabaciones tanto de televisión como en la música de Ross. El chico también le pedía que hablara en español para practicar, lo que a Valentina la llenaba de ternura.
Por primera vez había ido a la casa del rubio y se encontraban en el living acurrucados en el sillón blanco de cuero. Ya había terminado la película pero ellos no les interesaba, estaban en plena sesión de besos y solo besos.
Igualmente ella quería que pasara a otra intensidad y al darse cuenta que él no iba a avanzar decidió intentar ella. Lo empezó a tironear del cuello de su remera atrayéndolo hacia su cuerpo, él colocó sus manos en su cintura y profundizó el beso. Valentina se sentó arriba de él moviendo sus caderas mientras sentía como la calentura se apoderaba más de ella, hasta que él se detuvo y la miró sonriente.
— ¿Vamos mañana al mediodía a la casa de Anya? - Valentina se quedó desconcertada unos segundos y luego respondió.
— No sabía que eran conocidos, sisi vamos. Es como una fiesta de pileta si no me equivoco.
Él le da un pico y se levanta para preparar la cena. La rubia no tuvo de otra más que soltar un suspiro y acompañarlo en la cocina. ¿La acababa de rechazar? No maquinó mucho pero si se había quedado con pequeñas ganas.
Durmieron muy cariñosos entre delicadas caricias y besos, no se habló del tema pendiente y tampoco parecía que iba a suceder esa noche. Al día siguiente se prepararon juntos para ir a la casa de Anya. Había más gente de la que esperaba pero al posar su mirada en Enzo junto a sus amigos en una ronda, fue a hablarle a Anya.
— ¿Qué se supone que hace acá? - le pregunta sin dejar de mirarlo para que su amiga lo vea
— Ah, pensé que te caía bien. Se hizo amigo de varios en la fiesta de Jacob hace unas noches y lo invité.
— Acaba de ser nominado para muchos premios por La sociedad de la nieve y se rumorea de un par de Oscares. Ya junto a sus amigos están entrando a este mundo, vamos a verlo seguido - se une Zendaya a la conversación rodeando con un brazo a su amiga.
— Además es época en la que todos estamos en Estados Unidos, va a ver fiestas y reuniones para largo... - termina Anya y se va con ellos.
Valentina se fue a la barra con su amiga y mientras hablaban y bebía seguía pensando en Enzo. "El hijo de puta está de novio, genial genial".
Valen le agarró la mano a Ross, cuando este se acercó y lo llevó hasta un salón vacío. El rubio sorprendido le acepta el beso luego de cerrar la puerta y sonríe en medio mientras la sostiene de la nuca y la cintura. No le gustaba. El chico la apretó más hacia él consiguiendo que la joven soltara un pequeño gemido. Ella enredó sus piernas alrededor de la cintura de Ross y este la agarró desde la piernas pegándola contra la pared. Algo seguía sin gustarle. Sus manos jugaban con el pelo del chico y tirando de este. ¿Estaba desquitándose con él? Puede ser.
Repentinamente se abre la puerta del estudio de donde estaban y se encuentra a Matías y a Enzo.
— Ahora sí, contame boludo - dice Matías que es el primero que pasa al salón pero se detienen al verlos in fraganti.
Enzo se notaba que estaba muy tenso apretando la mandíbula y sin decir nada se va, siguiéndolo atrás su amigo pidiendo disculpas a la pareja.
— Ya está Enzo dale, decímelo acá nomas, nadie nos escucha - sigue aún a su amigo por ciertos pasillos que rodean la pileta que se encuentra en medio.
El mayor se da vuelta bruscamente y le confiesa que iba a cortar en cualquier momento con Lola, que ya lo venían hablando pero hubo algo que lo hizo darse cuenta y se aseguró de tener que hacerlo. Matías se sorprendió mucho, creyó que la pareja estaba enamorada y conectaban, pero es cierto que ese pensamiento no estuvo en los últimos meses.
— No la hagas sufrir, lo único que te pido. Sabes que es mi amiga, hacelo lo antes que puedas.
— Pasa que esa es la razón para pedirte ayuda, vos la conoces por ese otro lado. Yo no soy amigo de Loli y ese fue nuestro problema. Igualmente quiero quedar bien con ella.
Enzo ya lo venía sintiendo de hace un tiempo, cuando apareció en sus redes sociales el estreno de la nueva película de Valentina recordó que ella fue su amiga y tuvo sentimientos en paralelo. Pero eso no lo podía tener con Lola, simplemente no era algo para forzar.
Enzo justo pasó al frente del salón en el que habían interrumpido la escena que no quería ver, y salió Valentina. Él se detuvo mirándola cerrar la puerta y chocarse contra él. La rubia levantó la mirada lentamente pensando en su siguiente movimiento.
Se pasó el pulgar en las comisuras de la boca, lo que daba a entender algo a Enzo a propósito, aunque este solo soltó una risa burlona, por más que solo fuera para esquivar la idea que no le gustaba para nada.
— Sé que no lo hiciste chiquita, te conozco - dijo tan cerca de ella que la hizo volver a poner nerviosa por tanta proximidad después de mucho tiempo.
— ¿Ah sí? - dijo sonriente sin darle mucha importancia y justo cuando iba a continuar, sale Ross del estudio y mientras cierra la puerta se coloca bien el cinto de los pantalones. Enzo vio lo ocurrido, frunció el ceño y el sentido de enojo lo invadió en todo el cuerpo y Valentina podía sentirlo - Ups - dijo falsamente y se fue sola con el resto de amigos sabiendo que el chico no quitaba su mirada en ella mientras caminaba.
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valentinafelter
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