Ilham, una joven recién graduada en fisioterapia, ha enfrentado un pasado lleno de traumas y adversidades. Criada por su madre junto a su hermana, ha superado innumerables obstáculos y ha jurado no volver a ver a su padre. Durante todos estos años...
Hoy es el gran día. Ayer estuvimos todo el día de tienda en tienda, preparando el local, la tarta, fuimos a recoger los kaftans, también para que Rania se hiciera el maquillaje y el peinado de prueba, a ver si le gustaba. Los padre de Rania estaban aquí que llegaron ayer, estoy en casa de Rania. Ayer nos dormimos muy temprano, y bueno seguimos en la cama las dos, dormimos las dos, estuvimos hablando toda la noche hablando. Desde hace mucho estaba esperando este momento, estaba triste pero a la vez contenta, no podía controlar mis emociones. Desperté a Rania, y bajamos las dos a desayunar, khalto nos había preparado el desayuno, ellos dos ya habían desayunado, solo faltábamos nosotras.
-Que rico está todo khalto, muchas gracias.-le dije.
-Todo lo que prepara mi madre está delicioso.-dijo Rania.
-Gracias mis niñas, venga que hoy tenemos muchas cosas.-dijo la madre de Rania.
(Por cierto la madre de Rania se llama Sanae)
Desayunamos entre tanto hablábamos de cómo organizaremos el día. A las 10 a.m. teníamos que ir a la peluquería para que le hicieran el peinado a Rania y ya luego iríamos al local, era muy grande con habitaciones donde nos iban a maquillar y arreglar a la novia.
Nos vestimos con un chándal, no nos maquillamos porque no tenía sentido, dentro de unas horas nos iban a maquillar. Nos montamos en el coche de khalto Sanae y fuimos a la peluquería.
-Pues bueno, se nos va.-le dije yo a khalto Sanae refiriéndome a Rania.
-Si, justamente ayer estaba pidiéndome que la peinara y hoy ya se casa, parece que estoy en un sueño sin fin.-me dijo ella.
-Ya parar ya, de verdad, mn sbah wntoma haka.( Desde la mañana y seguís así).-dijo Rania riéndose de nosotras.
-Dahki, dahki,(ríe , ríe) cuando estés ya casada en tu casa nos vas a extrañar.-le dije yo.
Estamos ya en la peluquería, estuvimos como media hora allí esperando a que le hicieran el peinado.
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Le quedó alucinante, seguidamente fuimos al local, mi madre, mi hermana y khalto Sanae ya estaban ahí. Pedímos un taxi y nos llevó al local donde estaban. Estaba todo vacío pero hermoso, solo invitaron a familiares cercanos pero hombre eran muchos, ya sabéis marroquíes.
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