Selene.
El sol se va desapareciendo lentamente dejando un rastro anaranjado y rojizo por las nubes y sobre el mar. Mis manos danzan con el pincel capturando la esencia del lugar donde crecí y haciendo que el atardecer se vuelva eterno sobre el lienzo. Doy los últimos toques a la pintura antes de que la noche llegue completamente.
Disfruto al máximo mi tiempo en Nápoles, la ciudad que me vio crecer y que inspiró mis sueños, cada que tengo tiempo libre vengo a pasarlo aquí.
Guardo todas mis cosas y procuro que la pintura no se manche por el camino, no es grande y no tengo problemas cuando lo subo al auto. Llego a casa después de pasar toda la tarde disfrutando de la ciudad y especialmente de la playa , la cual está llena de turistas en esta temporada.
_Ya volví_ aviso desde la entrada_.
Dejo mis materiales de pintura en la sala y voy hacia la cocina buscando a mi nana, el olor a comida recién hecha cala en mi interior haciendo que se me alegre el corazón por la sensación tan familiar.
_Hola mi niña_ saluda sonriente cuando me ve entrar_ me alegra que ya estés en casa.
_ Y a mi me alegra verte_ me acerco a ella y le doy un beso en la mejilla logrando que me envuelva entre sus brazos cariñosamente.
_Te preparé tu comida favorita por ser tu última noche en casa.
_Eres la mejor, gracias_ tomo mi lugar en la barra y me trae una gran porción de lasaña casera_.
Disfruto cada bocado como si fuera el último en el mundo y agradezco el talento que nana tiene en la cocina. Cenamos mientras hablamos de todo lo que pasa en nuestras vidas y planeando las próximas vacaciones.
Mi nana Sofia se muestra feliz por todas la historias que le cuento, pero sé que la tristeza que trata de ocultar es debido a que tengo que volver mañana a Londres, nunca le ha gustado del todo mi trabajo.
Después de pasar unas horas más hablando y tomando vino, subo a mi habitación para empacar mis cosas ya que tendré que viajar temprano y no pienso madrugar.
Estar en Nápoles es como volver a ser la niña que corría por la calle tratando de alcanzar a un gato callejero; y es como ser la adolescente que amaba pasar la tarde con sus amigas mientras trataban de aparentar ser mayores para ligar con los turistas universitarios que venían por los festivales de música.
Mientras voy guardando mi ropa en la maleta veo las fotos de cada momento de mi vida, la más nueva es donde estoy recibiendo mi diploma con la sonrisa más brillante que una persona puede tener, luego las de mi niñez en donde tenía un gran escases de diente, lo que no impedía mostrar mi sonrisa con un helado en la mano, también están los recuerdos de mi adolescencia y la del baile de fin de curso con el que era mi novio en el instituto.
La última foto es de cuando tenía dos años y estaba con mi abuelo, no recuerdo nada de él ya que murió poco después de que yo cumpliera tres años y quedando así al cuidado de mi nana Sofia. A mi padre nunca lo conocí porque desapareció tan pronto como supo que venía en camino, mi madre murió en el parto y mi abuela lo hizo mucho antes de que yo naciera debido a un accidente de autos.
Mi única familia en el mundo es Sofia, quien cuidó de mi como lo haría una verdadera madre y nunca hizo que careciera de amor. siempre me habla de como era mi mamá de joven y todos los dolores de cabeza que le daba a mi abuela.
Dejo de divagar en el pasado y termino de preparar mi maleta antes de irme a dormir, el vuelo tan solo dura un par de horas pero quiero pasar el día en mi departamento antes de regresar al trabajo.
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Destino Oscuro.
RomanceLos secretos son necesarios para mantener el orden en la vida de una persona, pero no se pueden ocultar para siempre, y menos cuando el destino comienza a jugar sus cartas. Selene tiene una vida feliz conforme al camino que ella decidió tomar, pero...