Shut Down - JENLISA g!p

Capítulo 24

JENNIE

"Debería haberle dado a Mino luz verde para matarte." Murmuré.

"Ojalá lo hicieras."

Me burlé, enfurecida. "¿Lisa, la gran detective, quiere morir?"

"Si no puedo estar contigo, entonces sí, quiero morir. Si no puedo tenerte a mi lado, entonces esta vida no vale la pena vivir."

"Eso es jodidamente patético, Lisa."

"Si soy patética, entonces soy patética por ti. Si estoy loca, entonces estoy loca por ti. Si no estás conmigo, Jennie, entonces ya no quiero vivir en este mundo. No vale la pena."

"¿Quieres morir?" Saqué un cuchillo de mi bolsillo y lo coloqué en su cuello. "¿Cómo debería matarte?" Me burlé. "¿Debería tallar la palabra mentirosa en tu pecho?"

Ella no se encogió de miedo ni siquiera mostró una señal de vacilación cuando estiró y colocó mi mano con el cuchillo sobre su corazón.

"Talla tu nombre en mi corazón."

"Normalmente, los hombres son los que quieren tallar sus nombres."

Ella me dio una media sonrisa, y su labio roto comenzó a sangrar de nuevo. "Creo que hemos establecido que no somos normales."

"¿Querías mi nombre tallado en tu pecho? ¿Por qué?" Susurré.

"Porque te amo, Jennie. Te amo, y soy tuya. Adelante. Graba tu nombre justo aquí. Hazle saber al mundo que te pertenezco, cariño, que siempre y solo te perteneceré a ti. "

"¿Me dejarías hacerte esto?"

"No te estoy dejando, Jennie. Necesito que lo hagas. Adelante, mi pequeño bonito diablo. Muéstrame a quién pertenezco. Muéstrame que te pertenezco."

No pude contenerme. Le di una fuerte bofetada en su cara.

"¡Imbécil!" Lloré. "¡Maldita imbécil!"

"Lo sé."

Ella mantuvo sus ojos en mí mientras se quitaba su camisa y la dejaba caer al suelo. Agarró mi mano otra vez y colocó la punta del cuchillo en su pecho. Mis ojos recorrieron descaradamente su pecho, e inhalé bruscamente por lo hermosa que era. La belleza de Lisa siempre me dejó muda, y a pesar de mi enfado, todavía me afectaba de la misma manera. Ellos cayeron hasta la cicatriz en su costado cuando la apuñalé, y la miré por un momento demasiado largo.

"Sigue." Ella animó.

"¿Qué se supone que significa tallar mi nombre en tu pecho?" Murmuré.

La miré a través de mis pestañas mojadas, y su mano se acercó para limpiar mis mejillas.

"Significa lo que quieras que signifique."

"Todavía no lo hace bien."

"Lo sé." Ella suspiró, y pude sentir la subida y caída de su pecho bajo mi toque. "No soy una persona rica, Jennie. No puedo humillarme ofreciéndote diamantes y villas. Soy una persona humilde, una policía, y vivo en un apartamento que probablemente sea más pequeño que toda tu cocina. Vengo de una familia de clase media, y amo a mi familia con todo mi corazón."

Tragó como si odiara no poder ofrecerme lo que quería ofrecerme. Lo que ella pensó que tenía que ofrecerme.

"No quiero comprar tu perdón, y sé que no soy digna de él, y de ti, pero tengo la paciencia y todo el tiempo del mundo para recuperarte. Entré en este juego pensando que sería una seducción fácil, pero me demostré a mí misma que estaba equivocada cuando me enamoré de ti. Ni siquiera lo vi venir, y me golpeó como un terremoto. Me destrozó y me sacudió hasta lo más profundo. Te amo, Jennie. Amo todo de ti. Eso es todo lo que tengo para ofrecerte. Mi amor, devoción y mi lealtad."