🥀 𝐶𝑎𝑝𝑖𝑡𝑢𝑙𝑜 𝑋𝑋𝑉

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La noche comenzaba a acercarse.

JiSung había estado todo el día afuera, comió a sus horas, se tomó los medicamentos sin vomitarlos y dejó de insultar a todos, se veía feliz.

-Esto no es normal.

-No puede estar así de un día para otro.

-Algo está pasando.

Los tres chicos estaban afuera de la habitación de JiSung escuchando como cantaba una melodía hermosa.

Su voz aguda erizaba la piel de aquellos chicos y sus dudas aumentaban.

-¿Creen que se esté mejorando y éste superando a MinHo? Digo, ya pasaron 5 meses.

-No lo se.

Se miraron entre ellos y después de tanto tiempo, decidieron mantenerse callados, solo escuchando la melodía.

"A͓̽l͓̽l͓̽ I͓̽ w͓̽a͓̽n͓̽t͓̽ i͓̽t͓̽'s͓̽ n͓̽o͓̽t͓̽h͓̽i͓̽n͓̽g͓̽ m͓̽o͓̽r͓̽e͓̽,
T͓̽o͓̽ h͓̽e͓̽a͓̽r͓̽ y͓̽o͓̽u͓̽ k͓̽n͓̽o͓̽c͓̽k͓̽i͓̽n͓̽g͓̽ a͓̽t͓̽ m͓̽y͓̽ d͓̽o͓̽o͓̽r͓̽.

C͓̽a͓̽u͓̽s͓̽e͓̽ i͓̽f͓̽ I͓̽ c͓̽o͓̽u͓̽l͓̽d͓̽ s͓̽e͓̽e͓̽ y͓̽o͓̽u͓̽r͓̽ f͓̽a͓̽c͓̽e͓̽ o͓̽n͓̽e͓̽ m͓̽o͓̽r͓̽e͓̽,
I͓̽ c͓̽o͓̽u͓̽l͓̽d͓̽ d͓̽i͓̽e͓̽ a͓̽ h͓̽a͓̽p͓̽p͓̽y͓̽ m͓̽a͓̽n͓̽ I͓̽'m͓̽ s͓̽u͓̽r͓̽e͓̽.

W͓̽h͓̽e͓̽n͓̽ y͓̽o͓̽u͓̽ s͓̽a͓̽i͓̽d͓̽ y͓̽o͓̽u͓̽r͓̽ l͓̽a͓̽s͓̽t͓̽ g͓̽o̽o͓̽d͓̽b͓̽y͓̽e͓̽,
I͓̽ d͓̽i͓̽e͓̽d͓̽ a͓̽ l͓̽i͓̽t͓̽l͓̽l͓̽e͓̽ b͓̽i͓̽t͓̽ i͓̽n͓̽s͓̽i͓̽d͓̽e͓̽.

I͓̽ l͓̽a͓̽y͓̽ i͓̽n͓̽ t͓̽e͓̽a͓̽r͓̽s͓̽ i͓̽n͓̽ b͓̽e͓̽d͓̽ a͓̽l͓̽l͓̽ n͓̽i͓̽g͓̽t͓̽h͓̽.
A͓̽l͓̽o͓̽n͓̽e͓̽, w͓̽i͓̽t͓̽h͓̽o͓̽u͓̽t͓̽ y͓̽o͓̽u͓̽ b͓̽y͓̽ m͓̽y͓̽ s͓̽i͓̽d͓̽e͓̽.

B͓̽u͓̽t͓̽ i͓̽f͓̽ y͓̽o͓̽u͓̽ l͓̽o͓̽v͓̽e͓̽d͓̽ m͓̽e͓̽, W͓̽h͓̽y͓̽ y͓̽o͓̽u͓̽ l͓̽e͓̽a͓̽v͓̽e͓̽ m͓̽e͓̽?

T͓̽a͓̽k͓̽e͓̽ m͓̽y͓̽ b͓̽o̽d͓̽y͓̽, t͓̽a͓̽k͓̽e͓̽ m͓̽y͓̽ b͓̽o͓̽d͓̽y͓̽.

A͓̽l͓̽l͓̽ I͓̽ w͓̽a͓̽n͓̽t͓̽ i͓̽s͓̽... A͓̽n͓̽d͓̽ a͓̽l͓̽l͓̽ I͓̽ n͓̽e͓̽e͓̽d͓̽ i͓̽s͓̽,
T͓̽o͓̽ f͓̽i͓̽n͓̽d͓̽ s͓̽o͓̽m͓̽e͓̽b͓̽o͓̽d͓̽y͓̽, I͓̽'l͓̽l͓̽ f͓̽i͓̽n͓̽d͓̽ s͓̽o͓̽m͓̽e͓̽b͓̽o͓̽d͓̽y͓̽.

𝙇𝙞𝙠𝙚 𝙮𝙤𝙪~"

De repente dejaron de escuchar a JiSung cantar, mientras el sentimiento de la canción y su voz, se combinan y los hacían llorar.

-¿Que ha pasado?

Bangchan algo intranquilo, abrió la puerta y se encontró a JiSung dormido.

-Esta dormido- Dijo tranquilo.

𝘌𝘴𝘵𝘢 𝘤𝘰𝘯𝘮𝘪𝘨𝘰.

Escuchó la voz suave de su amigo joven y entonces corrió a JiSung.

-Oye... Mocoso, despierta.

-Chan ¿Que haces?

ChangBin interrumpió.

-Él está...- Sonreia pero lloraba.

-¿Que dices?- Kim entró.

-JiSunngie... Pequeño... Estás en buenas manos ahora ¿Cierto?- Chan lloraba abrazándolo, mientras que el cuerpo del menor perdía color y calidez.

-JiSung está...- ChangBin no podía parar de llorar.

-Feliz con MinHo- Susurró Kim abrazando a ChangBin y de igual manera llorando.

-Es así... Es así como funciona su estúpido Juntos por siempre.

𝘗𝘰𝘳 𝘴𝘪𝘦𝘮𝘱𝘳𝘦... 𝘛𝘦 𝘭𝘰 𝘱𝘳𝘰𝘮𝘦𝘵í.

-¡𝘔𝘪𝘯𝘏𝘰! 𝘔𝘪𝘯... 𝘔𝘪 𝘢𝘮𝘰𝘳.

𝘚𝘶𝘴 𝘣𝘳𝘢𝘻𝘰𝘴 𝘢𝘱𝘳𝘦𝘵𝘢𝘣𝘢𝘯 𝘥𝘦𝘮𝘢𝘴𝘪𝘢𝘥𝘰 𝘦𝘭 𝘤𝘶𝘦𝘳𝘱𝘰 𝘥𝘦𝘭 𝘮𝘢𝘺𝘰𝘳 𝘺 𝘦𝘴𝘵𝘦 𝘴𝘰𝘭𝘰 𝘭𝘦 𝘤𝘰𝘳𝘳𝘦𝘴𝘱𝘰𝘯𝘥𝘪ó.

-𝘏𝘢𝘴 𝘭𝘭𝘦𝘨𝘢𝘥𝘰 𝘱𝘦𝘲𝘶𝘦𝗇̃𝘰.

-𝘛𝘢𝘳𝘥𝘦 𝘵𝘢𝘯𝘵𝘰... 𝘓𝘰 𝘴𝘪𝘦𝘯𝘵𝘰, 𝘲𝘶𝘦𝘳í𝘢 𝘭𝘭𝘦𝘨𝘢𝘳 𝘢𝘯𝘵𝘦𝘴 𝘱𝘦𝘳𝘰 𝘤𝘪𝘦𝘳𝘵𝘰 𝘴𝘦𝘳 𝘯𝘰 𝘮𝘦 𝘥𝘦𝘫𝘢𝘣𝘢.

𝘙𝘪𝘦𝘳𝘰𝘯 𝘺 𝘴𝘦 𝘢𝘣𝘳𝘢𝘻𝘢𝘳𝘰𝘯 𝘥𝘦 𝘯𝘶𝘦𝘷𝘰.

-𝘊á𝘭𝘭𝘢𝘵𝘦, 𝘺𝘢 𝘦𝘴𝘵á𝘴 𝘢𝘲𝘶í... 𝘔𝘪 𝘢𝘮𝘰𝘳, 𝘮𝘪 𝘱𝘦𝘲𝘶𝘦𝗇̃𝘰, 𝘮𝘪 𝘳𝘢𝘻ó𝘯 𝘥𝘦 𝘷𝘪𝘷𝘪𝘳, 𝘮𝘪 𝘰𝘵𝘳𝘢 𝘮𝘪𝘵𝘢𝘥.

𝘈𝘤𝘢𝘳𝘪𝘤𝘪ó 𝘴𝘶𝘴 𝘮𝘦𝘫𝘪𝘭𝘭𝘢𝘴 𝘳𝘰𝘴𝘢𝘥𝘪𝘵𝘢𝘴.

-𝘎𝘳𝘢𝘤𝘪𝘢𝘴 𝘱𝘰𝘳 𝘭𝘢 𝘮𝘪𝘵𝘢𝘥 𝘥𝘦 𝘵𝘶 𝘤𝘰𝘳𝘢𝘻ó𝘯.

-𝘕𝘰 𝘩𝘢𝘺 𝘥𝘦 𝘲𝘶𝘦 𝘢𝘮𝘰𝘳, 𝘤𝘶𝘢𝘭𝘲𝘶𝘪𝘦𝘳 𝘤𝘰𝘴𝘢 𝘱𝘰𝘳 𝘵𝘪.

-𝘛𝘦 𝘢𝘮𝘰 𝘔𝘪𝘯𝘏𝘰, 𝘵𝘢𝘯𝘵𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘴𝘪𝘦𝘯𝘵𝘰 𝘲𝘶𝘦 𝘷𝘶𝘦𝘭𝘰- 𝘊𝘦𝘳𝘳ó 𝘭𝘰𝘴 𝘰𝘫𝘰𝘴 𝘴𝘪𝘯𝘵𝘪𝘦𝘯𝘥𝘰 𝘭𝘰𝘴 𝘭𝘢𝘣𝘪𝘰𝘴 𝘥𝘦 𝘴𝘶 𝘢𝘮𝘢𝘥𝘰 𝘢𝘱𝘳𝘦𝘵𝘢𝘳 𝘭𝘰𝘴 𝘴𝘶𝘺𝘰𝘴, 𝘦𝘹𝘵𝘳𝘢𝗇̃𝘢𝘣𝘢 𝘦𝘴𝘰, 𝘭𝘰 𝘦𝘹𝘵𝘳𝘢𝗇̃𝘢𝘣𝘢 𝘢 é𝘭.

𝘛𝘰𝘥𝘰 é𝘭.

-𝘛𝘦 𝘢𝘮𝘰 𝘮𝘪 𝘚𝘶𝘯𝘨𝘨𝘪𝘦, 𝘱𝘦𝘥𝘢𝘻𝘰 𝘥𝘦 𝘮𝘪 𝘴𝘦𝘳- 𝘓𝘰 𝘣𝘦𝘴𝘰 𝘥𝘦 𝘯𝘶𝘦𝘷𝘰 𝘺 𝘦𝘴𝘵𝘢 𝘷𝘦𝘻 𝘦𝘭 𝘵𝘢𝘮𝘣𝘪é𝘯 𝘴𝘦𝘯𝘵í𝘢 𝘷𝘰𝘭𝘢𝘳.

La habitación que alguna vez fue de JiSung quedó completamente vacía, sus pertenencias se fueron a la casa de MinHo en donde hicieron una fundación para los niños huérfanos, MinHo dejó una carta que llegó al día siguiente de su muerte.

Los tres chicos que estuvieron al tanto de sus vidas y de su amorío, aquellos que lucharon por dejarlos juntos, aquellos que se enamoraron de su amor.

Aquellos que pensaban ya no verlos más, miraron por el enorme ventanal que daba al patio tracero, salieron juntos y entonces, los vieron.

Dos pequeñas mariposas volando en circulos hacia el cielo, juntas una de la otra, dejando ver cuánto se amaban, cuanto habían esperado para ser eternos.

Las mariposas al principio bajaron y tocaron los rostros de los mayores haciéndolos reir un poco y a la vez llorar.

-Siempre nos visitaran ¿Cierto?

Las mariposas reposaron un momento en sus manos, después volaron tan alto que desaparecieron entre los destellos del sol.

Entrelazaron sus manos y como lo prometieron....

𝘚𝘦𝘳𝘦𝘮𝘰𝘴 𝘮𝘢𝘳𝘪𝘱𝘰𝘴𝘢𝘴, 𝘴𝘦𝘳𝘦𝘮𝘰𝘴 𝘦𝘵𝘦𝘳𝘯𝘰𝘴, 𝘢ú𝘯 𝘦𝘯 𝘦𝘭 𝙛𝙞𝙣𝙖𝙡.

𝘚𝘦𝘳𝘦𝘮𝘰𝘴 𝘮𝘢𝘳𝘪𝘱𝘰𝘴𝘢𝘴, 𝘴𝘦𝘳𝘦𝘮𝘰𝘴 𝘦𝘵𝘦𝘳𝘯𝘰𝘴, 𝘢ú𝘯 𝘦𝘯 𝘦𝘭 𝙛𝙞𝙣𝙖𝙡

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Hᴇᴀʀᴛ ᵐⁱⁿˢᵘⁿᵍ (𝖠𝖽𝖺𝗉𝗍𝖺𝖼𝗂𝗈́𝗇)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora