Piedra Preciosa [Dr. Stone]

1

Narrador

Aquel día...
Todos los humanos del planeta...
¡Se convirtieron en piedra!

—¡Escucha, Senku!—llamó Taiju entrando al laboratorio.—¡Ya lo he decidido!¡hoy es el día!¡Hoy le diré a Yuzuriha estos sentimientos que he tenido durante los últimos 5 años!

Rugio como si de un animal se tratase, eso sorprendió a la mayoría de las personas del laboratorio.

—Oh, bueno bueno... eso es un poco interesante, sin duda—respondió Senku aburrido.—Te apoyaré con tanta fuerza que tal vez mi cuerdas vocales se rompan... desde aquí, el club de ciencias, obviamente.

—¡Ohhhh, genial!¡muchas gracias, Senku!—dijo Taiju.

—Ugh, ya cállate... como si te fuera a dar un milímetro de apoyo, zoquete—dijo Senku.

—¿¡Que?! ¡Decídete de una vez!

○En otro lado.

—Que... ¿Que crees que me quiera decir Taiju?—preguntó Yuzuriha.

Estaba cerca del árbol donde se reuniría con el antes mencionado. Su amiga estaba atrás de este mientras le daba ánimo a la castaña. Que aún que no lo hacía notar, estaba nerviosa.

—Tal vez por fin decidió confesarse lo que siente—río mirando de reojo a su amiga.

—¡Nyoko!—gritó en un susurro la castaña.

—Tranquila, aún que es más que obvio, yo estaré aquí por si algo pasa, suerte—le guiño un ojo y se volvió a esconder detrás el árbol.

La castaña rió—Gracias Nyoko-chan.

Nadie se percató de que Senku veía todo desde la ventana del club, conocía a la chica, si, desde niños, desde niña ella fue entusiasta y parecía cargada de adrenalina todo el tiempo, como si fuera a explotar y portaba siempre una enorme sonrisa que combinaba con sus grandes ojos dorados.

Al poco rato llego Taiju.

—¡Escúchame por favor, Yuzuriha!—grito Taiju decidido.—durante los últimos 5 años... yo...

Nyoko que veía todo de primera plana se sintió atraída a una potente luz verde que venía directo hacia ellos, llevo sus manos a su pecho y se apegó al árbol asustada con los ojos muy abiertos pegando un pequeño grito.

Todos vieron la luz e igualmente estaban sorprendidos y asustados. Taiju, que había notado a Nyoko atrás del árbol gracias a su grito, les gritó a ambas chicas que se agarraran al árbol de alcanfor y se puso delante para protegerlas. Se estaban convirtiendo en piedra...

Las personas se habían convertido en piedra, los autos chocaron y crearon embotellamientos, los aviones cayeron aplastando los edificios y explotando rompiendo algunas estatuas...

Nyoko

—¡Ahh! ¿Que es...este lugar tan oscuro? Acaso...¿ya me mori? ¡No! ¡mi conciencia sigue aquí! ¡no moriré, voy a vivir!

...

—¿Cuanto tiempo a pasado? Siento que mi conciencia se va cada cierto tiempo, pero no me rendire, saldré de aquí de alguna manera.

Narrador

Hace tiempo que el planeta calló su ruido, dando paso a la vegetación, y la explosión de las alcantarillas dio paso a inundaciones arrasando con todo a su paso. Ya no era el mismo planeta.

¡Crack!

Nyoko

—¿Que fue ese sonido? ¿Hola?

Narrador

Dos grietas se habían formado en la mejilla derecha, dando una forma singular, la joven se movió un poco y logró liberarse con dificultad de esa prisión de piedra en la que tantos siglos ha estado atrapada.

Cayó arrodillada al césped sintiendo algo de frío por la falta de sus prendas.

—Bienvenida...Nyoko

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Al rato lo edito.