"Todos conocen a Huggy Wuggy y Poppy Playtime, pero ¿es seguro el último juguete de Playtime Co para sus hijos?" dijo el presentador del noticiero mientras miraba a la cámara. "Lo que acaban de ver es el nuevo Playtime Co, las criaturas sonrientes, una caricatura especial para conmemorar la salida de los juguetes del mismo nombre", agregó. "Pero ahora ambas enfrentan la polémica debido a la inclusión de un miembro de su elenco..."
"Este es Catnap"
El noticiero mostró una imagen del juguete mientras continuaba: "Y, como los otros juguetes de la línea, parece bastante inocente. Sin embargo, padres en todo el país reportan que sus hijos están teniendo extrañas y violentas pesadillas ¿Y a su lado? Un pequeño y sonriente Catnap". Luego, mostraron una foto de la fábrica.
"Ahora, con la controversia en alza, Playtime anunció que retirará todos los juguetes de Catnap de la línea de criaturas sonrientes", continuó el presentador del noticiero, mostrando las imágenes. "Y ya han quitado su imagen de todo material promocional, pero con el daño causado, ¿podrá desaparecer así de fácil?"
La cámara volvió al presentador, quien concluyó: "La causa exacta de los incidentes es desconocida, pero solo una cosa parece ser evidente aquí..."
Sus hijos no están seguros con Catnap.
"Tenía razón", se quejo Dash en voz baja. No sabía cómo había llegado allí ni cuándo había sido, solo se encontraba sola en una habitación vacía. No podía quitarse la maldita sonrisa. Al parecer, era así. Le faltaba un brazo y su oreja estaba a medias, además de tener un tubo atravesando su estómago. No sabía cómo había llegado hasta allí.
No por ahora...
Arrastrándose en el suelo con una sola pata, Dash luchaba por moverse con normalidad debido al tubo incrustado en su estómago, que ahora estaba lleno de sangre. "Dios...", murmuró, sintiendo la debilidad invadir su cuerpo. Se arrastró un poco más y luego se sentó, respirando con dificultad. Con su única pata, extrajo el fierro que estaba incrustado, observando horrorizada la cantidad de sangre que brotaba. No tenía idea de dónde estaba su guitarra ni de la ubicación de sus amigos. Todo parecía oscuro y confuso.
Siguió arrastrándose hasta que escuchó un ruido. Se puso de pie de un salto y miró a su alrededor, preguntándose si todo era solo una pesadilla. Sin embargo, alguien estaba detrás de ella: una figura felina con patas y piernas largas. ¿Catnap? No podía ser él, ¿verdad? Desesperada, retrocedió y tropezó, retrocediendo hasta quedar contra la pared. Se dio cuenta de que estaba atrapada.
El pulso de Dash latía con fuerza mientras trataba de contener el aliento ante la amenazante presencia de Catnap. Tragando saliva con dificultad, apenas pudo murmurar "¿Catnap?". Antes de que pudiera reaccionar, una nube de gas rojo llenó la habitación, envolviéndola con su inquietante aroma. Dash luchó por contener la respiración, pero la necesidad de aire se volvió exigente. Con un último esfuerzo, intentó resistir, pero finalmente entro al sueño inducido por el gas, cayendo en la oscuridad de la inconsciencia.