𝗙𝗔𝗞𝗘 || ɢ!ᴘ

SEVEN

Ya han transcurrido algunas semanas desde que Roseanne decidió poner fin a ese amorío que estaba viviendo con Lisa. No por Yunki, sino por ella misma, no quería ser una prostituta o una ofrecida.

Jamás esa palabra debería usarse para describirla. Era Roseanne Park, la mujer del momento y no podía arruinar su título de mujer perfecta para los medios, eso sí que no.

Pero para Lisa, había sido un verdadero sufrimiento no poder verla de nuevo. Ahora más sabiendo que había tenido que ver con su prima, Park Jennie.

Eso solamente hacia más difícil el camino, sus errores le hacían difícil poder estar cerca de quién según ella amaba. Pero sabemos que eso no es amor, solamente es un poco de necesidad y deseo, no algo más.

Pero al parecer su corazón no logra entenderlo. Es necio así como ella, terco y testarudo, desde luego que si. No podía ver qué había alguien dispuesta a amarla como nunca, alguien que daría la vida por ella si fuera necesario. Una chica que era amable y buena persona, tan linda como una diosa. Tan perfecta para ser real.

Pero no, no lo veía.

Jennie no se iba a rendir tan fácilmente, se una u otra forma iba a poder estar con Lisa y hacerle ver que ella podía ser suficiente para cuidarla y amarla todo el tiempo que fuera necesario. Muy cursi, pero era lo que su joven corazón sentía y quería expresar.

Para lograr su cometido, debería acudir a Yunki y Jimin de nuevo, puesto que sola no se le ocurría algo con lógica para poder conquistar el corazón de Lisa.

Ambos chicos estaban sentados en el sofá, mientras que Jennie esperaba con impaciencia su respuesta y ayuda.

—Veo que en verdad te gusta Lisa y estoy feliz por ti —hablo Yunki.

—Gracias, en verdad yo amo a Lisa y solamente quiero demostrarle mi amor.

—Suenas muy enamorada, pero, ¿Eres consciente de que mi hermana tuvo su amorío con ella? No quiero que después la odie o algo por el estilo. —dijo Jimin preocupado.

—Lo sé perfectamente y la verdad es que no me importa, Roseanne ama a Yunki después de todo, simplemente debemos permitirnos ser felices. —responde con felicidad en su rostro —. Además, sé que todo eso será olvidado cuando Lisa sepa la verdad.

—¿Una verdad? ¿De qué hablas, Jennie? —pregunto Jimin un poco confundido.

—Estoy encinta, de esa vez que estuve con Lisa yo quedé embarazada. Lo supe apenas pero he decidido tenerlo, y sí, aún si a ella no le parece pero confío en que sí.

—¿Alguien más la sabe? Y felicidades prima, estoy feliz por ti.

—Gracias Jimin. Lo sabe Roseanne y hasta ahora ustedes.

Yunki se sobresalto al saber que Roseanne sabía de ese embarazo y sobretodo porque fue la primera en saberlo, después de la madre claro. Pero aún así.

—¿Roseanne lo sabe?—hablo por fin Yunki.

—Si, ella se quedó con una ecografía, se veía muy feliz por mí, ambas perdonamos nuestras fallas y no hay rencor.

—Eso es bueno, por lo que veo solamente falta que yo y Lisa hagamos las pases, pero lo cierto es que no se va a poder —rió un poco en pelinegro—. Me alegro porque tú y Roseanne ahora sean igual o más unidas que antes.

—Desde luego, ahora quiero saber sí me van a ayudar o no.

Los tres rieron y empezaron a enfocarse en el tema principal de si reunión en el lugar. Era bueno después de todo saber que ambas primas ahora estaban bien la uno con la otra, sin rencor u odio de por medio.

Porque después de todo, ninguna hizo algo correcto, pero intentar remediarlo significaba mucho.

💋

Por su parte en la oficina de Roseanne, reinaba la paz y la tranquilidad que le ofrecía su soledad y el trabajo mezclados junto con un poco de música clásica.

Un completo nido de tranquilidad en ese día. Un poco caluroso a decir verdad, pero parecía ser el mejor de los días.

Ella dejó por un momento lo que hacía y después sacó la ecografía de su prima, para verla de nuevo y poder admirar a ese pequeño bebé. Era aún muy diminuto pero tan especial y hermoso.

Ese niño era el producto del amor de su prima, haría lo que fuera necesario para que ese bebé pudiera vivir en condiciones favorables, después de todo ella era su tía y quería lo mejor para él. Además de que un embarazo provocado por una chica G!P y una chica normal era algo no muy común.

Lo que hacía al pequeño más especial aún. Miraba la ecografía como una tonta, simple, sentía felicidad. Inexplicable pero la sentía. Tan entretenida estaba que cuando se dió cuenta ya había un intruso en su oficina. Lisa, había ido a verla sin un previo aviso.

Se acercó a ella en su escritorio e intentó besarla. Inmediatamente Roseanne se alejó poniéndose de pié.

—¿Qué crees que haces, Lisa?

—Lo que debí haber hecho hace ya un tiempo, no lo entiendes pero yo en verdad siento algo por ti y quiero vivir un romance contigo.

—Eso es ridículo, tú a mí no me gustas de la misma forma.

—Pero tú a mí sí, por favor dame una oportunidad y te demostraré que conmigo no te hará falta nada.

—No me hagas reír y sal de mi oficina, no quiero perder mi tiempo en tonterías.

Lisa se acercó a Roseanne y besó sus labios, mientras tomaba sus mejillas, Rose esta vez no correspondió, al contrario apretó sus labios evitando que Lisa pudiera seguir.

La contraria la miró con un poco de decepción y confusión a la vez, pero era lo mejor estar alejadas, más ahora que había un pequeño niño. Después de que ambas se alejaran, como una escena de película entró Yunki a la oficina.

—Amor, ¿Sucede algo? Te veo un poco molesta.

—No Yunki, estoy bien, de hecho me estaba despidiendo de Lisa, ¿No es así? —respondió ella, sin expresión como siempre.

—Si, yo estaba por irme, con permiso.

Al salir Lisa Roseanne abrazó a Yunki mientras que el otro acariciaba su cabeza y decía algunas palabras. Después de unos minutos cuando Lisa iba a salir de las oficinas, llegó Yunki corriendo.

—Lisa, toma, ojalá y esto sirva para que al fin puedas superar a mi novia —dijo entregándole la ecografía de Jennie.

Lo que nunca imagino es que Lisa creyó que se trataba de Roseanne y nunca se Jennie.