Bittersweet || Taegyu .ᐟ

13. Monopoly night

Beomgyu.

Que Beomgyu recuerde, sólo una vez en su vida se sintió incómodo. Y fue porque cuando era pequeño, se había caído mientras tiraba las flores en la boda de su tía. Pero de ahí en fuera, nunca volvió a sentir esa rara sensación o algo por el estilo.

Bueno, hasta ahora.

Se encontraba sentado en el comedor de la casa de Taehyun, pues éste le dijo que su madre quería conocerlo.

«El horror...»

La familia de Taehyun consistía en: él, su madre y su hermana (tal parece que el señor Kang había ido a la misma tabaquería que su padre). La mamá de Taehyun aún no había llegado y en ése tiempo, el más alto aprovechó para empezar a hacer la cena, dejando a Beomgyu sentadito en silencio con Sakura.

— ¡Joder! —escuchó exclamar a la chica. La fémina llevaba ya más de quince minutos tratando de pintarse las uñas de la mano izquierda, claramente sin éxito. Ya había manchado varias veces la mesa.

Beomgyu se empezó a reír, pero paró al sentir la mirada femenina sobre él.

—Ouh...yo te puedo ayudar—ofreció. Sakura alzó una ceja. Aquel niño se le había hecho raro al solo verlo cruzar la puerta. Su suéter (de un morado suave), su complexión (la cual lucía aún más pequeña al lado de Taehyun) y su voz (algo aguda).

Sakura lo había analizado. Pero no dijo nada.

— ¿En serio? —preguntó.

Beomgyu asintió—. Tengo cuatro hermanas pequeñas, lo he hecho antes—se encogió de hombros y tomó una servilleta, poniéndola bajo la mano de la chica—. Así no se manchará—explicó. Después tomó la mano de Sakura, junto con la pequeña brocha del esmalte. Empezó a pasarla por la uña femenina—. ¿Taehyun nunca te ayudó? —preguntó.

La chica rió—. No, nunca.

Beomgyu la miró—. Debo ser el único rarito que le ayuda a sus hermanas a hacerlo... ¡inclusive prueban los esmaltes en mí! Algo debe de estar mal conmigo...—rió.

Sakura sonrió—. No, yo creo que eres lindo.

El azabache la volvió a mirar.

Era igual a su hermano.

—Mamá acaba de hablar—mencionó Taehyun, mientras salía de la cocina—, dijo que está en camino y-... ¿qué están haciendo?

Beomgyu volvió su vista hacia sus manos, aún sostenía la brochita y la mano de Sakura—. Le pinto las uñas a tu hermana.

— ¿Por qué?

—Porque soy un buen ciudadano.

Taehyun alzó una ceja.

—Además—prosiguió—, dejaste que Eunchae te pusiera cosas en el cabello, déjame pintarle las uñas a tu hermana. Casi acabo.

Sakura rió y Taehyun se encogió de hombros.

Escucharon un auto estacionarse y el chico castaño sonrió.

— ¡Llegó! —exclamó y se encaminó hacia la puerta, abriéndola. Y al hacerlo, una mujer se dejó ver, sonriendo y cargando unas bolsas.

Beomgyu (quien había seguido a Taehyun) abrió los ojos.

¿Por qué toda la familia de Taehyun tenía que ser hermosa?

Sakura era hermosa, Taehyun era hermoso y por ley su madre también era hermosa.

Y luego estaba Beomgyu, con su suéter viejo y cabello desarreglado. Sin mencionar su actitud.