cero

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Babe era un omega muy hermoso, o al menos eso era lo que su madre le decía.

Vivían en una villa tranquila junto a una manada unida, grande, fuerte y amable. Rodeados de tradiciones y amplios paisajes donde sus lobos se podían sentir libres de correr, con la antigua y gigantesca luna, su hermosa guardiana.

Babe siempre fue alguien dulce, amistoso y algo tímido, de mejillas abultadas y ojos gatunos, no cabía duda que iba a ser un omega muy deseado, su olor a esa edad era leve pero siempre se podía distinguir el olor a vainilla y miel, sus padres sentían el orgullo de que su querido hijo atraería a un buen alfa.

Pero no fue así.

Cuando se presentó como omega a los doce años llamo notablemente la atención, recibía muchos halagos y ofertas de cortejo de alfas muy mayores, ofertas que él negaba por miedo y por estar enamorado de aquel pequeño alfa dos años menor que él.

Charlie.

Charlie era la proeza de los alfas, había sido reconocido en toda la villa por su increíble atractivo y cualidades de alfa a tan poca edad, era muy famoso en la villa y muy respetados por todos aún antes de presentarse como alfa.

Babe quedó flechado por aquel alfa de sonrisa afilada con una sola mirada.

Y es que Charlie era tan amable, fuerte, dedicado y alguien digno de admirar, jamás lo había visto enojar ni gruñir, era alguien tranquilo pero tenaz y fuerte, amigo de todos y muy respetuoso.

Sin mencionar que amaba su olor a canela y girasoles.

Pero sentía vergüenza, porque a unos meses de presentarse como omega jamás volvió a recibir ningún tipo de atención de algún alfa, todos se alejaban de él como repelente y Babe se planteó el hecho de que tal vez no era tan lindo omega como pensó o quizás tal vez su olor no era agradable. Por largo tiempo trato de arreglarse lo mejor que pudo para atraer la atención de algún alfa como antes pero nada funcionaba, y no es que Babe quisiera ser deseado por todos, pero vamos, sólo así podría atraer la atención de Charlie. O así él pensaba.

Pero este jamás se fijaría en él, y debía dejar de hacer quedar a su familia en ridículo como un omega rechazado, Charlie tan sólo era su sueño imposible.

Sin dudas ser un omega no querido, era muy difícil.

Él huele a girasoles. [PoohPavel Adapt.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora