Ensayos en plató

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Hoy era el día de ensayar en plató,  no estaba para nada nerviosa, porque nos salía súper bien. Me levanté, abracé como siempre a Kiki y Martin me dió un pico lo cuál me pareció raro pero bueno me puse feliz porque ninguno de los dos daba el siguiente paso por vergüenza o miedo al rechazo, aunque ambos sabíamos que estábamos enamoradísimos. Desayunamos y como le dije ayer a Chiara fuimos a ensayar toda la mañana hasta que era la hora de comer. A las dos aproximadamente empezamos a comer para tener tiempo, me quedé descansado el poco tiempo que me sobraba, a las tres ya salimos en camino al plató, para comenzar masomenos a las tres y media, ya que nos pilla un poco lejos de la academia, los ensayos en plato duran muchas horas, y cada uno va llegando a la academia poco a poco según vayan terminando su ensayo, esta vez somos de los últimos en actuar entonces llegamos bastante tarde a la academia, el ensayo nos salio perfecto nos dijeron que si mañana los hacíamos así, nos iba a ir muy bien, si no recuerdo mal llegamos a la academia sobre las ocho y media. Entonces me fui directamente a ducharme porque allí en plató hace mucho calor. Cuando termine de ducharme era la hora de cenar, asique me puse a cenar. Cuando termine de cenar me senté en el sofá, estaba muy cansada y no tenía ganas de seguir ensayando. Además hoy nos tenían una sorpresa preparada, nos pusieron una película.
A mí izquierda se sentó Kiki y a mí derecha Martín, yo tenía el presentimiento de que me iba a dormir porque hoy había sido un día muy ajetreado con muchas actividades, y obviamente así fue una hora después no aguanté el sueño y me dormí. Martin dejó que apoyará mi cabeza en sus piernas y mientras veía lo poco que quedaba de película me acariciaba tiernamente y me daba algún beso. Cuando la peli terminó me despertó dándome caricias y me llevo hasta mi cama, me deseó las buenas noches, me tapo con las mantas y me dió un pico antes de que él se tumbara en su cama.
Ese día noté que Martin estaba más cariñoso y yo no entendía el porqué. Cuando me dormí, tuve un sueño que se puede decir que me gustó, soñé que ensayando al acabar la canción Martin me agarraba la cara, me hacía mirarle a el y me besó, pero no es un simple beso, sino uno muy apasionado, que hizo que nos calentaramos más de lo normal. Me fastidio que fuera un sueño porque además se sentia muy real.

Martin y Ruslana Donde viven las historias. Descúbrelo ahora