𝑻𝑯𝑬 𝑴𝑰𝑳𝑲𝒀 𝑾𝑨𝒀 ── Descendientes

𝐂𝐀𝐏𝐈𝐓𝐔𝐋𝐎 𝐂𝐈𝐍𝐂𝐎

𝐉𝐄𝐅𝐅𝐑𝐄𝐘 𝐒𝐄 𝐌𝐈𝐑𝐎 𝐏𝐎𝐑 𝐄𝐍𝐄𝐒𝐈𝐌𝐀 𝐕𝐄𝐙 𝐄𝐍 𝐄𝐋 𝐄𝐒𝐏𝐄𝐉𝐎 posando la ropa que llevaría a la escuela, se escaneo de pies a cabeza, otra cosa que podría caracterizarlo de otros de la isla, es que a el no le gusta el cuero como a los de la isla. Así es, al parecer en la isla poseían una extraña afición hacia la ropa de cuero, casi casi ¡usándola hasta para calzones!

Bueno, aunque ahorita llevaba unos pantalones de cuero negro, su ropa no era todo de cuero, llevaba una playera gris desgastada y encima un suéter beige también desgastado y con tonos oscuros por la suciedad impregnada, llevaba sus ya mencionados pantalones de cuero sujetados por su cinturón y llevaba sus botas negras estilo militar.

Se arremango las mangas de su suéter y puso las manos en su cintura para volverse a escanear, suspiro y paso sus manos por su cabello revolviéndolo.

— Wow...— una voz se escuchó a sus espaldas y volteo para ver a su compañero de cuarto mirándolo — Pareces un vagabundo — dijo Aziz con una sonrisa burlona en su cara.

— Uy, lo siento "majestad", pero en la isla no hay tanta variedad como acá — dijo con sarcasmo y con su ceño fruncido por su comentario absurdo — Además si hablamos de ropa la tuya parece una pijama — dijo señalando la ropa que tiene puesta el árabe.

— ¡¿Pijama?! Para tu información es una ropa tradicional de mi reino y cuesta más de lo que tu cuerpo pagaría— dice el árabe señalando.

Jeffrey miro de arriba hacia abajo al moreno para sonreír, podría ser algo esquizo de su parte, pero en lo personal le encantaba sacar de las casillas a la gente llevándole la contraria por todo. Era su hobby.

— Mira como me importa — dice y Aziz solto un gruñido exasperado — Como sea, ¿Qué quieres? —.

Después de esta pregunta el chico se intento relajar, haciendo la técnica de respiración, la conocía era algo que hacía su madre cuando la hacía enojar, que lindos momentos.

— Vengo para ayudarte— dice ahora un más relajado Aziz.

— ¿Ayudarme? —

— Si, te indicare donde están tus salones, ya sabes, para que no te pierdas — dice Aziz haciendo una ademan para señalar a la escuela y el asiático solo asintió — ¿Me das tu horario?— . extendió su mano para recibir el horario del contrario.

Jeffrey camino hacia su mochila de mano para sacar su horario en uno de los cierres, agarro la hoja y se la extendió hacia Aziz, él la agarro y leyó el horario, sus ojos se abrieron de la sorpresa y alzó su mirada hacia el asiático para volver a agacharla hacia el horario y así repetidamente. Jeffrey al ver esa acción se saco de onda.