Todos los años es igual veo a las parejas felices demostrado su amor en 𝚂𝚊𝚗 𝚅𝚊𝚕𝚎𝚗𝚝𝚒𝚗, pero ¿y yo? Yo no tengo pareja para demostrar mi amor por alguien. No me importa no necesito a alguien en mi vida estoy bien solo. Fui como todos los días a comer a un restaurante para desayunar, me senté en el mismo asiento aburrido de siempre y llame al mismo mesero aburrido de siempre, mientras esperaba que me atendieran me puse a ver videos en Youtube.
—Digame ¿Cuál es su orden?, señor—
—lo mismo de siempre —dije aburrido y sin levantar la vista.
—lo siento, soy un nuevo mesero tal vez usted viene frecuente pero vuelvo a repetir soy nuevo. Vuelve a repetir ¿Que desea de comer?—dijo dulcemente. Levante la mirada y ví al chico más lindo del mundo, me quedé enbobado por unos segundos hasta recobrar el sentido.
—v-voy a pedir unos huevos con tocino —dije con una sonrisa nerviosa no podía dejar de ver su linda cara.
—okey señor en unos minutos estará su pedido —dijo devolviendo me la sonrisa.
—no me diga señor me hace sentir viejo, puede llamarme por mi nombre, soy Jardred —un pequeño sonrojo apareció en mi cara no era tan notable.
—bueno Jardred, yo soy Awita—solto una risita tierna, apenas se fue sentí mis mejillas arder, tumbe mi cabeza a la mesa Para que nadie viera mi cara sonrojada. Pasaron unos minutos y ví al mismo chico volver con mi comida.
—gracias por la comida, dulzura —dije lo último en susurró.
—de nada Jardred —se marchó al mostrador a recibir a los clientes mientras yo parecía tómate. Estaba comiendo lento para quedarme más tiempo a ver a 𝓐𝔀𝓲𝓽𝓪 parecía un acosador en mi mente. Al terminar de comer me quedé a pesar como quedarme más tiempo.
—hola Jardred, no te has ido ¿Porqué? Cuéntame —vi a la persona la cual me hablaba y ví al mismo chico sentado frente mío —n-no importa si no me quieres decir está bien no se porque deje eso-
—solto una sonrisa nerviosa.
—no está bien solte —un suspiro para comenzar a hablar— no lo sé no me quiero ir porque si me voy veré a esas personas felices celebrando San Valentín con su pareja y me preguntó ¿Qué hay de mi? Quien me ama, yo solo no se...—dije cansado.
—sabes yo tampoco tengo pareja y no tienes que sentirte mal algun día encontraras a alguien que te ame —dijo sonriendo.
—gracias Awita—
—no es nada para eso estan los amigos—
—¿amigos?—mencione confundido.
—ah?, si no quieres ser mi amigo está bien lo entiendo —dijo un poco triste.
—no, no es eso me encantaría ser tu amigo solo me sorprendió —ambos nos reímos un poco —oye Awita ¿no deberías estar trabajando?
—no, ya terminó mi turno —pasamos platicando todo el rato hasta que empezó a atardecer.
