La libertad siempre ha sido algo codiciado por aquellos cuyas vidas son forzadas a vivir de las apariencias, cuyas vivas son forzadas a ser simples objetos donde todos te sonrían de frente y por atrás hablarían de lo obsoleto que eres por carecer de aquellos atributos que se consideran el "estándar" en las personas.
Sin pensar en como se siente realmente esa persona.
Solo eres otra escalera mas para poder alcanzar poder entre tus "iguales" pero nunca lo alcanzaran, un ángel es poderoso por nacimiento, su simple mención es digna de admiración, su belleza es fuera de este mundo, ellos ayudan solo chasqueando los dedos, los ángeles son seres de amabilidad eterna, es algo que los mortales no pueden alcanzar porque a diferencia de ellos.
Los ángeles son puros...
Eso se creía, un simple pequeño ángel podían marcar una gran diferencia entre esta perfección autoimpuesta por los iguales.
Un príncipe de un reino nevado digno de la belleza mas puro del mundo, irónicamente no era digno de tal titulo su apariencia era... desconcertante, había cosas que lo destacaban entre los demás como su piel tan blanca como la nieve digna de alguien puro, cabello rubio pálido que con la brisa podías ver cada mechón de su pelo brillar con el mismo sol y sus ojos eran perfectos, dos hermosos zafiros que provocan misticismo a su ser.
Del resto era imperfecto.
Tenia en su cuello un hermoso plumaje de ave pero era sucio, no podía mantenerlo limpio y con sus emociones se levantara haciendo ver mal, desordenado, reprimir sus emociones provoca que su hermoso plumaje se alzara mas por que todos insistieran que era lo mejor. Su cuerpo no entraba en los cánones de belleza impuestos entre la realeza, robusto (por no decir obeso) desgraciadamente pero era una declaración a su amor a la comida.
No podía explicar porque algo tan banal como lo es el alimento puede encantarle tanto, tenia un algo que le encanta por mas de ser consciente de que no lo necesita, sin embargo la mera sensación de sentir todos los sabores mezclados de forma exquisita que hacían una gran explosión dentro de su boca, los olores que irradian los alimentos que provocaba que se sintiera atraído hacia ellos y esparcir sus dulces aromas en el ambiente, incluso si es tonto sus presentaciones eran algo que lo traía visualmente, podía ver todo su gloria servida en un plato que bueno...
¡Era difícil contenerse a no querer probar algo tan hermosamente delicioso!
Esto la ha traido mas problemas de lo que le gustaría, después de todo tenia todo para ser perfecto pero ¿Por que se aferra algo que era claramente dañino para su cuerpo? ¿Acaso disfrutaba las burlas o los maltratos a su persona por no ser físicamente perfecto?
Nunca ha sabido la respuesta.
La gente no conocían a la persona detrás de la corona, no conocían al chico tímido cuyo único deseo era tener un misero día libre, no conocían a la persona infeliz que tenia que fingir que era feliz, que amaba ser venerado y ser el futuro heredo de la corona de su padre.
Nadie conocían a Isaac.
Detrás del telón de ser un príncipe, Isaac era un torpe soñador, un niño pequeño que era forzado a crecer para alcanzar las expectativas de sus padres y del todo el mundo. Era tonto e infantil, adoraba jugar a que era un gran héroe que salvaba el mundo de la amenazas del mundo y cada vez tenia mas aventuras dignas de cuentos rodeado de amigos que lo amaban. Leía a diario sobre las historias de grandes aventuras de héroes que iniciaban desde cero pero lograban que todos los amaran independientemente de como lucieran, solo eran personas admiradas por sus grandes hazañas.
Deseo ser algún día uno de esos héroes dignos de leyenda.
Sin embargo ahora estaba perdido en el bosque, con su pierna lastimada, sin alguien que este ahi para cuidarlo en todo momento y sobre su aureola un ave fénix decidió hacer un nido que de alguna forma resistía incluso si el ave lo puso en un lugar tan inestable como lo es un aro flotante que irradia calor de forma constante.
Isaac miraba como sus ropas alguna vez preciosas echas por seda de las mas finas echas por los mejores costureros del reino, ahora eran simple trapos viejos, rotos y sucios que conservaba solo por que no quería estar desnudo, ya no llevaba unas botas preciosas que eran dignas de todo aquel de la realeza ya que resaltaban los colores de la pureza, solo podía ver sus tiernos pies que tenias cortes y lodo esparcido por gran parte de su pie como de la pierna. Tras soltar un suspiro miro la pequeña cueva que es un simple montículo de piedra formado de forma natural, lo uso para protegerse de una posible lluvia o tener un techo en el cual dormir.
Se sentía tan solo y tan aterrado, al inicio esto fue emocionante, estar afuera lejos de todo era una experiencia que jamas se hubiese imagino experimentar, fue liberador en tantos sentidos que no sabría enumerarlos pero esto se termino cuando se dio cuenta que estaba perdido de forma literal y metafórica.
Con sus secuestradores buscándolo para regresarlo a esa vieja casa y ahora estando en la intemperie con un montón de peligros le era imposible el poder idear un plan lo suficientemente bueno para librarse de ambos problemas al mismo tiempo.
Sin embargo el no era listo de su familia.
Su padre lo era. El era tan frió, calculador, sin sentimientos una mirada tan muerta que hacia que todos temblaran al verlo, con respeto y es tan bueno para idear estrategias en cuestión de segundos o mejor, era prácticamente el mejor espadachín que conocía.
¡Fue capaz de vencer a un ejercito con solo una espada!
Por otro lado era emocionalmente era un desastre pero su hijo no sabia eso.
Su madre no solo era una mujer hermosa, cuya mirada reflejaba amabilidad, pese eso es una mujer de mano dura, si rompes las reglas, ella personalmente te escoltara a la orca para acabar con tu vida y atentar contra los ciudadanos. Su mama incluso sin no ser la mejor guerrera de su reino era alguien que mantenía el lugar en pie con sus múltiples tareas o como olvidar que siempre organizaba los mejores eventos conocidos del reino, jamas se igualara como ella, simplemente su madre era perfecta.
A pesar de que conoce el lado mas horrible de su madre.
Se preguntaba si algún día llegara a ser igual de perfecto e útil como sus padres, pero jamas seria capaz de superarlos o llegar a las suelas de los zapatos, no entenderá nunca como logran mostrar tanta seguridad y tanta confianza que no heredo de ninguno de los dos.
¿Isaac no se considera a si mismo como alguien perfecto e útil?
Claro que no, sus padres no sufren de pánico escénico, sus padres no hacen que los eventos sean una vergüenza ajena, sus padres jamas se quedan paralizados del miedo cuando una situación les aqueja, sus padres simplemente no eran el y eso era un problema para Isaac que no ha sido capaz de superar.
Se ha preguntado profundamente cual fue su pecado de ser imperfecto y que le gustara serlo, de alguna forma.
Ahora lejos de casa, jamas lo sabrá así que derrotado se dejo caer contra el suelo viendo el pequeño techo de piedra pensando que pensaran sus padres al verlo en estas condiciones.
-¿Que pensaran de mi si saben como termine aquí?- pensó en voz alta cerrando sus ojos para descansar un poco.
Al menos su mundo de sueños era su único lugar seguro en estas tierras llenas de seres peligrosos.
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Tenia que hacerlo y me alegro al fin poder terminarlo.
Por si tienen dudas, así se ve isaac:
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Dibujos y opiniones regulares
De TodoLiteralmente no me gusta este libro pero no lo borro porque me gusta ver la evolución que tuve en mi dibujo que más bien es un pasatiempo. También demuestro que demonios veía en mis épocas oscuras. Creo que también lo utilizaré para dar opiniones, t...